Hearts Away. [Sherlock Holmes]

La verdad siempre sale a la luz.

Narra John:

Al llegar al living me encontré con Sherlock. Calmadamente bebía una taza de té. No lucía muy bien.

-¡Buenos días! -me dijo como si no hubiese pasado nada.

-Buenos días...

Saqué su celular de mi bolsillo y se lo dejé en la mesa.

-¿De dónde...? -me miró alarmado.

-Ayer te lo quité y no te diste cuenta. -le miré a los ojos- Ahora, ¿Me vas a decir qué carajos está pasando?

Ahí me contó que había ido a encontrarse con Irene por petición de su hermano, ya que le había dicho que consiguiera su celular. Y me dijo que nunca se había esperado... Lo que pasó. Y también, que creía que "La mujer" había grabado.

-Algo me dice que quiere algo de ti... -le dije seriamente.- Y no va a ceder.

-No lo sé... No quiero que esa sea la situación. -me dijo preocupado.

Narra Sherlock:

Conversaba con John cuando de pronto sonó mi celular. Era una llamada de "La mujer" y John vio el nombre. No pude ocultarle nada. Tuve que poner altavoz.

-¿Aló...? -respondí.

-Hola, amor. Esperando estés excelente después de lo de anoche... -rió sóla y John me fulminó con la mirada- Te traigo una linda propuesta~

-¿Q-Qué... Propuesta? -contuve el aire en mis pulmones.

-Mira, guapo, o te divorcias de la chiquilla esa o le mando nuestro video... ¿Qué dices? ¿Qué eliges?

-Así que grabaste... -me puse una mano sobre los ojos y solté el aire- No acepto ninguna de tus propuestas, adiós.

-¡Espera! ¿Entonces me dejarás elegir a mí?

-Dame... Tiempo. Por favor. Llegaré a alguna solución. Por favor no hagas nada... -estaba en problemas.

-Bueno. Por ser tú, te dejaré... Sólo 24 horas, Sr. Sexy Holmes. 24 horas. -me cortó.

Ah... Ahora si tenía un gran problema.

-John... -tomé mi cabeza entre las manos- Qué haré...

-Ah, no sé. Tú te metiste en ese lío... -me dio la espalda.

-Por favor, ayúdame... -le supliqué.

-Tendrás que elaborar un plan. Es todo lo que te puedo decir. Frankie lo sabrá de todos modos. Se lo cuentes tú o no.

-Hm... -me quedé pensando- L-Le daré una gran noche... -me mordí el labio, apenado.

-Lo que digas. Pero, sólo diré esto. Una lágrima de parte de Frankie por esta idiotez tuya... -hizo una pequeña pausa- Una sóla lágrima, y te mato. -sentenció.- Llamaré a Mary para que Frankie llegue a la tarde. Me quedaré allá hoy. Espero le cuentes lo que sucedió.

-¡Me siento sucio! -grité molesto.

-Pues... Deberías. -fue lo último que dijo John.

Le pedí a la Sra. Hudson que esa noche no dejara entrar a nadie a mi hogar. Ni siquiera por algún caso.

Me duché y cuando ya estaba oscureciendo, John se paró en la puerta y mientras Frankie subía las escaleras, mi amigo me dio una última mirada. Sabía que en el fondo, más allá de la molestia que él estaba sintiendo conmigo, me tenía lástima...

-H-Hola, cariño... -traté de sonar normal.

-¡Hola, bebé! -se tiró a abrazarme y contuve la tristeza.- Hey, ayer pareció que el teléfono te tragó.