Capítulo III

9.6K 1.1K 14
                                    

Capítulo III

       Recordar el pasado puede llegar a ser muy doloroso si no se detiene a pensar en el presente. Y era algo que podía comprobar cada día el capitán Lansdowne. Sin imaginar, que no era él único que pensaba lo mismo.



     Georgina Hamilton se encontraba en su jardín, contemplándolo, al mismo tiempo en que se disponía a sentarse en el césped. Agradeciendo al cielo el inicio de aquella primavera que se había despedido del frío invierno. Había soñado tanto en convertirse en esa señorita educada. Se había prometido aprender todo lo necesario. Sin embargo, la realidad le había golpeado. Ella siempre sería la hermana de Matthew Hamilton. Nada más.



     Cerró los ojos, controlando el deseo de llorar. No podía mostrarse débil. Él jamás debería verla llorar. Ni siquiera saber que él era el causante de sus lágrimas.



— Soñé demasiado... Y sólo conseguí conocer un corazón roto... Ahora solo ruego que se marché pronto a Jamaica. Cuando antes lo que deseaba era que se quedará en Manchester.—colocó sus manos sobre el césped—. Intentó mantenerme fuerte... Pero siento que su presencia me hace cada vez más débil. No debí enamorarme de un imposible...Nunca debí soñar con un imposible...



        Se recordó siendo una niña con ilusiones y cómo corría a su ventana cada vez que escuchaba que un coche se detenía en la propiedad de su familia. Su emoción era inmensa. Con tan solo su presencia, sabía que esos días serían agradables. Ni siquiera cuando se convirtió en una señorita se había minimizado aquella alegría. Siempre le esperaba con la misma emoción. Se miraba al espejo y comprobaba su apariencia. Deseaba que el capitán contemplara la mujer en que ella se estaba transformando. En vez de la niña que siempre veía en ella.



      Siempre corría y bajaba los escalones hasta detenerse en el mismo lugar de siempre, entre los primeros escalones de la escaleras de la sala principal, mientras Matthew se encontraba afuera, esperando a su amigo. Su corazón saltaba de alegría al verlo entrar, por lo que ella procuraba sonreírle y hacerle una perfecta reverencia, ocultándole sus sentimientos. Desde ese primer instante lo inundaba con preguntas. Ni hablar de aquellos momentos en que se sentaba en la biblioteca, solo para escucharle hablar sobre sus recientes experiencias. Esperando saber si le había traído un nuevo obsequio de esos viajes a Jamaica, imaginándose a ella, algún día viajando a aquel lugar, convertida en su esposa.



—Te he traído un nuevo obsequio, Georgina... Sé que te encantará tenerlo entre tus libros.—le expresó, haciendo evidente que aún recordaba aquel momento en que le había conocido, siendo descubierta tomando un libro de su hermano.

—¿Un atlas?

—No sabía que tipo de libro obsequiarte... Y recordé que desde que te conozco, te agrada preguntarme mucho sobre Jamaica. Espero que te sea útil y aprendas un poco más...

—Gracias... Es un regalo perfecto.

—Al observar los planos y los mapas, podrás visualizarte en cualquier parte del mundo. De alguien que quienes amamos la vida en alta mar.



       Ella le sonrió, sin saber que todos sus sueños, pronto, serían truncados.



¿Alguna vez me contara cómo son los bailes en Jamaica? ¿Son como dicen que son los bailes en temporada?

—¿Los bailes?—la miró con atención, asombrándose por aquel repentino interés—. ¿Quieres saber cómo son los bailes?

—Si... ¿Las señoritas se visten igual con sus hermosos vestidos tan pomposos?

—¿Has estado en algún baile de sociedad?

—Todavía no... Es lo que les he escuchado a mis compañeras de clases. Todas ellas hablan sobre su futura presentación en sociedad y hablan que sus vestidos serán pomposos, afirmando que es allí donde encontrarán a sus futuros esposos. ¿En Jamaica es igual?

—Ciertamente se realizan reuniones sociales... Pero no son como las que los ingleses están acostumbrados aquí.

—¿Se comprometerá usted en Jamaica?

—No he pensado en ello...—sonrió pensando que sólo era una pregunta debido a la curiosidad de una niña. Al no verla aún como una señorita que se estaba transformando en una hermosa mujer—.Pero si llegase ese momento. Te prometo que les informaré...

—¿Promete que lo hará?

—Sí...—miró el libro que tenía en su manos—.¿Sentido y Sensibilidad? ¿Es de tu hermano?

—No... Es un libro de una escritora llamada Jane Austen... Muchas de mis compañeras lo han estado leyendo. Y le suplique a mi hermano que me lo comprara.

—Entiendo...—sonrió y comprendió que si querer había avergonzado a Georgina—. Espero que en mi próxima visita me cuentes de qué trata.

—Se lo prometo...



     Él le sonrió. Sin embargo, en su próxima visita lo único que encontró fue su apatía, después que él hizo visible sobre su posible compromiso, esperando en esa temporada, encontrarse con la señorita que había conquistado su corazón en la temporada pasada.

************************************************

Hola a todos mis lectoras (Y lectores)... Gracias una vez más por su apoyo, su comentarios, sus votos y darle una oportunidad. Saludos...


Simplemente Tú ( 5to libro-Serie Todo lo que Soy) (Editada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora