Un nuevo comienzo

Capítulo~9 - La Misión Pte: 2

Aquel chico despreocupado que estaba sentado en el cordón de la vereda de aquel café parecía disfrutar lo que sucedía a su al rededor. Se notaba en su sonrisa al observar un edificio humeante que se veía en el horizonte.

Tenía unos anteojos de sol negros que reflejaban el sol devastador que daba al mediodía, vestía unos vaqueros negros y una remera roja con lo que parecía ser un dragón de varias cabezas, parecía ser de una serie de televisión, una serie la cual nunca comencé a ver pero siempre tuve la curiosidad.

Estaba bebiendo un frappé de aquel lugar, según parece se lo había preparado él mismo.

El chico se levantó y comenzó a reír de forma malévola. Arrancó una de las sombrillas de aquel lugar y comenzó a romper los vidrios, uno tras otro, y al mismo tiempo se reía.

A todo esto nosotros estábamos atrás de aquel container observando. Nunca esperé encontrarme otra persona en aquel lugar, tal vez tenía que quitarme aquel sentimiento egoísta de creer que solo había sobrevivido yo y quiénes me acompañan.

Aquel sujeto se sentó nuevamente y volvió a contemplar el horizonte cuando de repente comenzó a hablar.

-¡Oigan ustedes!, Si, ustedes dos!
Ya pueden salir, los vengo observando hace 3 cuadras, no son muy "sigilosos" que digamos.

Ambos nos quedamos atónitos. No queríamos decir palabra y nos quedamos quietos como estatuas.

-¡Acerquence! No tengan miedo.

Nos miramos a los ojos con Martin, él asintió con la cabeza y lentamente comenzamos a salir de atrás del container.

Caminamos hacia él lentamente fijando la vista en caso de que intente algo. Me extrañaba que aún mientras nos acercabamos el no sacaba los ojos de aquél edificio.

Estábamos a 3 metros de él, demasiado cerca para ser un desconocido con aspecto de persona peligrosa.

Giró la cabeza y nos miró a los ojos uno a uno, nuevamente comenzó a reír y dijo:
-¿Qué tenemos aquí? Un chino y su amigo...

-Oye eso ofende -dijo Martin-

-¿Te pregunté si te ofende? -dijo el sujeto-

-Ya! Es suficiente! -grité-. Ya que nos enfrentamos, serías tan amable de decirnos quién diablos eres?

-Me dicen James -respondía mientras se acomodaba los lentes de sol-. Y ustedes, par de fenómenos, como se llaman?

-Me agrada este chico -dije-

Martin me pegó un codazo en una costilla.

-Auuuch! -grité-

-¿Sabían que parecen dos idiotas? -dijo James-.

-Dos idiotas que sobrevivieron a un ataque terrorista -respondí-. Ahora dinos, James -dije mientras hacia comillas con los dedos-, ¿Cómo es que has sobrevivido a esto?

-¿Y a ti que te importa cómo lo haya hecho? -respondió de mala gana-

-Oye solo intentamos ser amigos. -dije-.

-¿Amigos? Jajajaja -dijo en tono burlón- Al parecer lo único que me queda es deshacerme de ustedes.

-¡Espera! -exclamó Martin-

-Ya no hay nada que esperar, vamos a jugar -dijo en tono malévolo-

Lo que ocurrió después fue muy rápido.

James se abalanzó sobre Martin y lo empujó, haciendo que caiga al suelo y golpeándolo. Cuando reaccioné, yo también me lancé hacia él y comencé a patearlo con todas mis fuerzas para separarlo de Martín, pero se volteó y en un ágil movimiento me arrojó hacia el container de basura en el cual nos escondíamos anteriormente. Era rápido, hay que reconocerlo, pero no iba a poder con nosotros dos (o al menos eso esperaba). Antes de que pudiera girarse para seguir golpeando a mi amigo, se escuchó un ruido de vidrio rompiéndose y James cayó medio noqueado hacia adelante, permitiéndome ver a Martin detrás de él con lo que quedaba de una taza entre sus dedos.

-Eso fue raro-dije-¿de dónde sacaste una taza?

-Hay varias tiradas por ahí-contestó Martin haciando un ademán en dirección a las mesas extrañamente intactas de la cafetería-y parece que todavía sirven para algo.-

Automáticamente nos acercamos, Martin se agachó y le apretó los brazos contra el piso y yo le puse el pie encima de sus costillas.

-Lo diré muy simple, nosotros nunca tuvimos ninguna intención de hacerte daño, eres tú el que saltó hacia nosotros. Pero por lo que se ve no eres tan fuerte como crees -dije bien confiado de mis palabras-
Nosotros tan solo queríamos un poco de agua para sobrevivir. Mira, matar a alguien o a algo va en contra de mis principios y valores, pero nunca dije nada sobre torturar -dije mientras empezaba a apretar con el pie-

James se retorcía y sufría pero al parecer no quería demostrar su dolor.

Martin observaba toda la situación atónito.

-¡No por favor! -gritó James- Haré lo que quieras pero por favor detente.

-Bien -dije mientras quitaba el pie y me comenzaba a reír-  has visto eso Martin? -me burlaba de James- ¿En verdad eso ocurrió? ¿En verdad se la creyó?

-Al parecer si lo hizo, incluso yo mismo lo creí. -respondió Martin-

-Espera, ¿era toda una actuación? -dijo James quedando con la boca abierta-

-Pues claro que sí "James" -nuevamente hize comillas con mis dedos-

James tenia los ojos como platos. Jamás creí que se lo pudiera llegar a creer, y menos viniendo de mi.

Se paró lentamente quejándose del dolor de espalda causado por el golpe, se sacudió el polvo de asfalto y dijo:
-Mira, en verdad lamento eso, fue un instinto. -dijo de manera culposa-. Tú me has perdonado la vida, ¿que puedo hacer para compensarlo?

-Pues... -dije-

Martin y yo nos miramos y automáticamente el comprendió lo que se me había ocurrido.

-Oh no, no no no, de ninguna manera -dijo Martin haciendo gestos con las manos-.

-Piénsalo Martin, talvez no volvamos a ver una persona viva en "quién sabe cuanto tiempo" -acoté-

-Pero eso no es una excusa -respondió mirando hacia arriba-

-No me importa, lo necesitamos. Después de todo un par de manos más para cargar agua no vienen mal.

James se había volteado nuevamente a ver aquel edificio humeante y otra vez empezó a reírse

Me di vuelta hacia él y lo llamé, el no reaccionaba, aproveché a agacharme y tomar otra de las tazas del suelo y directamente fuí al grano.

-¡Oye James! -dije fuerte- ¿te gustaría acompañarnos?

Martin volvió a verme de mala gana.

-Claro que sí! -respondió James de forma muy exaltada-

-Pues bienvenido al equipo -dije mientras le rompía la taza en la cabeza y caía inconsciente-.