Capítulo 10

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Febrero 2010

No se necesitaba ser un genio para saber que "T.A." era la abreviatura que estaba usando Tom para decirle a Regina "Te Amo", o al menos eso fue lo que pensó Emma, la hermana de Tom, el día en que él olvido apagar la computadora. Por pura curiosidad se puso a ver los mensajes que le dejaba su hermano a esa tal Regina, lo que le desconcertó un poco es que aquella chica también concluyera con un "T.A.", y si ella no recordaba mal se suponía que esa chica tenía novio, no le parecía correcto que estuviera ilusionando a su hermano diciéndole que lo amaba, pero tampoco sabía qué hacer.


No se necesitaba ser un genio para darse cuenta que "T.A." era la abreviatura que Regina estaba usando para decirle a Tom que lo amaba, y David tenía que admitir que eso era algo que no le gustaba para nada, pues en los más de 2 años que llevaban siendo novios ella nunca le había dicho "Te Amo". No se le hacía justo que se lo estuviera diciendo a otra persona, y que aquel chico no viviera siquiera en el mismo continente. Ahora tenía algo claro, esa noche Regina tendría que decirle que lo amaba...



Era 14 de febrero, la fecha en que todos los enamorados abarrotan las calles y derraman miel por donde pasan, Regina odiaba ese día, aunque tenía con quien pasarlo se le hacían muy falsas tantas muestras de cariño. Aún así, se unió junto con su novio David a dicho festejo

— Vamos al restaurante que te gusta— le propuso David

— Hecho, aunque... seguramente estará llenísimo, ¿tienes un plan B?— preguntó ella y el negó

— Lo importante es que la pasemos juntos, ¿no?— David se acercó a darle un tierno beso que ella correspondió.



Tom acordó esa noche salir con Valerie después de la prueba de vestuario de la película de Thor. La ventaja de trabajar en una súper producción era que antes de las grabaciones podía hacer las pruebas de vestuario en cualquier parte del mundo y, antes de irse a Los Ángeles quiso pasar ese día con su mejor amiga.

— ¿A dónde vamos?— preguntó Valerie acomodándose su vestido

— ¿Quieres ir a algún bar?— preguntó Tom alborotándose el cabello

— Perfecto, aunque seguro todo estará lleno de parejitas— dijo fastidiada

— Podemos fingir ser una y no sentirnos tan incómodos— Tom la tomó de la cintura y ella se puso del mismo color que su vestido.

Una vez que llegaron a aquel bar se dirigieron a la barra para pedir sus tragos

— ¿Y cuándo te vas?— preguntó Valerie

— Mañana en la noche— recibió las bebidas que le ofreció una de las meseras

— ¡Vaya! Pues será difícil no tenerte por aquí cerca— dijo tratando de no sonar triste

— Sabes, te voy a extrañar— dijo Tom dándole un sorbo a su bebida, Valerie casi se atragantó con la suya

— ¿En serio? ¿Por qué?— preguntó nerviosa

— Porque no tendré con quien platicar estos tres meses o salir aunque sea a pasear— explicó Tom, Velerie sonrió

— Tendrás a tus compañeros de reparto, además sólo serán tres meses— remarcó ella para tratar de animar a su amigo

— Ya..., pues igual te voy a extrañar— dijo Tom recargándose en la barra

— Puedes dejarme mensajes en Twitter o Facebook, así como a tu amiga Regina—

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