C 4. Sentimientos y frustraciones

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La pelea había comenzado, pero no importaba cuantos esfuerzos hicieran los héroes, su enemiga se transparentaba para no recibir ningún daño, de repente llegó un momento en el que ella pareció aburrirse de jugar con ellos, así que simplemente atravesó las paredes como queriendo ser perseguida. Los compañeros se miraron un segundo algo extrañados, pero finalmente cayeron en su juego, así que estuvieron de un lado para otro tratando de encontrar a la villana, cada quien por su lado para que sea más rápido.

- Hola lindo gatito - Phantom Queen había aparecido detrás de él

- Allí estás- dijo sorprendido por su repentina aparición

- Yo te encontré a ti- le guiñó un ojo mientras lo empujaba al interior de un armario de limpieza. Ella entró con él, aseguro la puerta y comenzó a volver invisible todo lo que había allí. Volteó a verlo y con su poder fue capaz de arrebatarle a Chat noir la vara de sus propias

- ¿Qué haces? - decía Chat intentando detenerla

- Ya no la necesitarás, será más fácil vencerlos si los separo, hasta luego gatito- fue lo último que le dijo antes de atravesar la pared.

Ladybug ya se estaba cansando de buscar a su enemiga, se detuvo y comenzó a pensar en un plan para atraparla, pero apenas se había detenido sintió que una sombra la invadía de pies a cabeza. Ella permaneció con la mirada en el techo y no notó como del suelo brotaba Phantom Queen.

- Sí, ese yoyo es totalmente mi estilo

- Tú, ¿qué haces con eso? - señaló el bastón de su compañero

- Sólo un pequeño obsequio de rendición de ese hermoso gatito

- ¿Rendición?, estás mintiendo, ¿dónde está él?

- Dame el yoyo y te lo diré

- No confío en ti

- Como quieras, pero será demasiado tarde para cuando lo encuentres

- ¿Qué le hiciste?

- Lo mismo que te haré a ti.

"Cataclismo" gritó Chat noir para poder escapar del cuarto en el que estaba, destruyo la puerta y salió corriendo preocupado por su compañera. Llegó a donde ellas luchaban, la akumatizada usaba su bastón en contra de Ladybug. Chat intervino y en ese instante la heroína aprovecho para decir "amuleto encantado" y de inmediato en sus manos apareció una libreta con un bolígrafo rojo con puntos negros, ella se había quedado pensando que debía hacer cuando Chat noir es lanzado contra la pared.

- ¿Mi lady? - pregunto el felino mientras se levantaba

- Yo...

- Esto ya me aburrió- dijo Phantom Queen al mismo tiempo que veía a sus oponentes pensando que hacer– Se acabó el primer acto- sonrió abalanzándose contra ellos. Lo primero que hizo fue quitarle a Ladybug los objetos que llevaba en las manos y los desvaneció- Lo siento. Pero odio los autógrafos- se arregló el cabello y continuó su ataque.

Ladybug pudo esquivarla. Pero Phantom Queen iba realmente por Chat noir, logro alcanzarlo y lo sujetó por los hombros volviéndolo invisible momentáneamente, lo continuó empujando a través de las paredes que iban pasando una por una, ella le guiñó un ojo mientras lo soltaba violentamente contra un ascensor, el superhéroe rebotó contra el suelo mientras permanecía inconsciente por el impacto.

- Dulces sueños gatito- le dio un beso volado y volteo dándole la espalda, adivinando la aparición de Ladybug. - Hola pequeña

- ¡Chat noir! - vio a su compañero que yacía boca abajo dentro del ascensor- Esto lo pagaras, no nos vas a derrotar

- Jajá- cerró los ojos y un segundo después estaba al lado de la heroína- pero eso ya lo hice querida- sujetó el yoyo que tenía en la mano y habiéndoselo quitado, la abrazo e inmediatamente la empujó hacia donde estaba el héroe felino, Ladybug se levantó algo desconcertada por lo que acababa de ocurrir, alcanzó a ver como la villana cerraba la puerta automática y desaparecía el panel de control interior.

- Detente- la heroína se intentó ir a darle batalla, pero escuchó como sus aretes hacían ese bip bip que la alertaba sobre la destransformación.

- Parece que tu tiempo se agota- una pequeña carcajada provino de su boca- Adiós y gracias por el obsequio- le mostró el yoyo con recelo y se dio media vuelta

- No te vayas- Ladybug corrió para detenerla, pero una vez más sintió como la atravesaba y se estrelló contra la puerta

- Me das lástima -le susurró al oído y colocó su mano sobre la cabeza de la heroína como si la estuviera consolando, pero al mismo tiempo en señal de burla- mejor suerte para la otra ocasión, de seguro podrás hacer algo menos patético que eso -fue lo último que dijo antes de irse, pero no sin antes dedicarle una mirada de desprecio y lástima.

- No puedes.... Esto no es cierto... - Ladybug se había quedado arrodillada con la cabeza apoyada a la puerta. Chat noir se fue despertando viendo como las lágrimas empapaban el rostro del amor de su vida, ella se había volteado para mirarlo, era el único que podía entender ese dolor de derrota y la impotencia de no poder ser capaz de cumplir su objetivo.

Chat noir aún permanecía quieto observando a su oponente mientras salía de sus pensamientos, de esos recuerdos que afloraban entre mezclas de dolor y alegría, ¿cómo un día tan perfecto había terminado tan mal?, cerró sus puños enojado, no era justo, no se merecía pasar por tanto dolor, parecía que cada vez que su vida tomaba un color más alegre el destino se encargaba de oscurecerlo, de entristecerlo. Su vida se había reducido a intentar salir de esos mares de tristeza en los que se hundía, pero cada vez que estaba a punto de ponerse a salvo, venía una ola que volvía a sumergirlo en lo más profundo. Ni siquiera como Chat noir había podido escapar del sufrimiento, lo había intentado, pero sin éxito, sólo era un modo de distraerse, pero tarde o temprano volvía a ser Adrien. Y volvía a ser un prisionero bajo las ordenes de su padre. Pero ¿por qué? ¿por qué él? ¿no se supone que era una buena persona? ¿por qué la gente que ayudaba si podía ser feliz y él no?, aún mantenía los puños cerrados, pero cada vez iba estrujándolo más, el enojo se había apoderado de él, pero no se comparaba al gran dolor que habitaba muy en su interior. Pero si todo eso era cierto ¿por qué seguía luchando?, esa pregunta apareció abarcando cada espacio de su mente y su corazón, cerró los ojos, de inmediato los rostros de todos sus amigos llenaron su pensamiento inundando su corazón de una tibieza reconfortante, sus manos se relajaron y se fueron abriendo poco a poco. "Gracias" susurró con alegría, en medio de todas esas imágenes de su mente estaba ella, la bellísima dueña de su corazón... Ladybug, la más adorable y gentil persona que conocía, era fuerte, valiente, fuerte, noble, bella y todo cuanto podría imaginarse y más, pero al lado de ella estaba esa linda muchacha tímida y tierna...Marinette, su primera amiga, la chica insegura y talentosa con la que salía en grupo, con la que había pasado todo el día, ella también era hermosa, no podía evitar sonreír cuando pensaba en ella.

Marinette, su primera amiga, la chica insegura y talentosa con la que salía en grupo, con la que había pasado todo el día, ella también era hermosa, no podía evitar sonreír cuando pensaba en ella

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MI amor por ti --Miraculous Ladybug--Donde viven las historias. Descúbrelo ahora