C 11. ¿Trabas?

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Al día siguiente, Tikki estaba tratando de que Marinette se despertase, pero no lo lograba. La chica se aferraba a las sábanas con todas sus fuerzas.

- Marinette, llegaras tarde a la escuela

- Ya te dije que no iré Tikki, no insistas

- Pero tus padres te castigarán y ya no podrás salir ¿qué tal si aparece un akuma?

- Pero yo no quiero

- Marinette por favor

- Sé que cuando lo vea me moriré de la vergüenza

- Debes ir -logró quitarle la sábana

- Que no

- ¡¡¡Marinette ya despierta o no llegaras a la escuela!!! -gritó su mamá desde el piso de abajo.

- Ya voy -se levantó

- Qué bueno -suspiró Tikki aliviada

- Tienes razón Tikki, debo tomarlo por el lado bueno

- Si Marinette

- Buenos días señores Dupain Cheng -se escuchó la voz de Alya

- ¡¡Es Alya!! Tikki escóndete

- Si -se metió al bolso de Marinette

- Buenos días, ¿dormiste bien?

- Hola Alya, ¿qué haces aquí? ¿No se supone que nos veríamos en la escuela?

- ¿Acaso crees que no te conozco? Sé que serías capaz de faltar a clases

- ¿Yo? -risa nerviosa- ¿por qué piensas eso?

- No importa vámonos

- Si

Las dos amigas caminaron hasta la escuela, Merinette no dejaba de estar nerviosa, quería tomar la carta de la mochila de Alya y salir corriendo, pero algo la detenía, de verdad quería que Adrien sepa sobre sus sentimientos, pero el miedo era demasiado grande.

- Ya vuelvo, te veo en el salón -le dijo Alya cuando estaban en frente de la escuela

- ¿Iras a dejar la carta en el casillero?

- Si

- ... -bajó la cabeza

- Debes tener fe -le dijo mientras colocaba su mano en el hombro de su amiga- nos vemos

- Hasta luego -Mainette caminó directo al salón y se sentó, cruzó los brazos y apoyo su mentón en la mesa. Había visto el sitio de adelante. Adrien aún no llegaba.


Alya estaba parada frente al casillero de Adrien, sacó la carta que tenía en la mochila y la cogió con ambas manos. Justo en el instante en que iba a pasarla por la ranura del casillero sintió como alguien la empujaba. Un segundo después se encontraba en el suelo.

- ¿Por qué no te fijas? -dijo Alya algo molesta

- Lo lamento, soy tan torpe -Lila se estaba levantando y le extendió su mano para ayudarla- Resbale sin querer, ¿me perdonas?

- Sí, no hay problema -Alya no sabía en donde había quedado la carta y la buscaba con los ojos- ¿no has visto un sobre?

- ¿Sobre? – Bajó la mirada y encontró el objeto justo debajo de sus pies- te refieres a este? -le entrega la carta

- Si – lo coge y ve que el exterior se había manchado

- Fue mi culpa ¿verdad?

- No es nada

- Claro que sí, así no podrás entregárselo a nadie -vuelve a coger la carta- pero no te preocupes tengo más sobres en mi casillero, yo lo arreglaré -sale corriendo

- ¿Lila? -Alya recoge su mochila del suelo y va tras ella- Esa chica es muy rápida, ¿Dónde está? -la empezó a buscar

- Sólo necesita un nuevo sobre -sonrió Lila mientras abría la carta, la leyó con rapidez- ¿Así que Marinette también está enamorada de Adrien? -coge una tijera y corta la firma de la parte inferior- Y ya está -sonríe- es un poco cursi, pero es una confesión muy original, realmente expresa lo que siente o mejor dicho lo que yo siento -cogió el paquete se sobres y escribió su nombre en uno. Había estado espiando a Marinette y Alya cuando llegaron y así se había enterado de la carta.

Al mismo tiempo, afuera de la escuela Sabrina le estaba contando a Chloe todo lo que había visto, como Marinette hablaba de una carta de confesión, Alya estaba tratando de ponerla en el casillero de Adrien y Como Lila se la había quitado y corría ...

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Al mismo tiempo, afuera de la escuela Sabrina le estaba contando a Chloe todo lo que había visto, como Marinette hablaba de una carta de confesión, Alya estaba tratando de ponerla en el casillero de Adrien y Como Lila se la había quitado y corría a su casillero

- Eso es muy interesante -dijo Chloe- ya sabes que hacer después

- Sí Chloe -sonrió y se fue corriendo

-          Sí Chloe -sonrió y se fue corriendo

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Continuará...

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