Para quienes están ansiosos por la segunda temporada, pues esta es una continuación de como se quedo la serie luego de los capítulos de Volpina y orígenes.
Será una historia cargada de romance y batallas (^▿^) espero que les guste
El otro día en la escuela, Marinette entró al salón acompañada de su mejor amiga Alya quien continuaba hablando de los sucesos del día anterior y de cómo los héroes de París habían derrotado a Phantom Queen. La de ojos azules detuvo su mirada en Adrien, él cuando se dio cuenta la saludó con la mano, Marinette intentó corresponder al saludo, pero de inmediato Chloe apareció detrás suyo y la empujó mientras corría a abrazar al joven rubio.
- Adribu, buenos días ¿me extrañaste?
- Hola Chloe
- Sí, hola Chloe -dijo Marinette entre dientes mientras tomaba su lugar junto a Alya
- Sonríe niña, míralo que tengo -agita su celular en la cara de su compañera
- ¿Qué es lo que tienes Alya?
- Pues hace un momento te decía lo genial que fue el combate de ayer, incluso tengo unas grabaciones.
- ¿En serio?
- Sí, me escabullí por el edificio y entonces allí comencé a grabar justo cuando Ladybug y Chat noir luchaban contra Phantom Queen. -le mostró el video- pero ya no pude seguirles el paso cuando ella huyó y fueron a perseguirla. Intente buscarlos, pero creo que la villana me encontró primero.
- Te arriesgas demasiado Alya
- Es el trabajo de una reportera, además este video que subía a mi Ladyblog tiene cientos de visitas.
- Felicidades -dijo aún con la cabeza apoyada en el escritorio, miraba de reojo a Adrien
- Debes decirle- le susurró a su mejor amiga
- ¿Qué? No...no aún
- Si quieres, pero no te tardes o alguien te podría ganar -le señaló a Chloe
- Tienes razón -Marinette cerró los ojos
- Mira esta es la parte en la que Chat noir protege a ladybug, es tan tierno, creo que él la ama demasiado.
- ... -Marinette levanta la cabeza y mira el teléfono de Alya-
- ¿Ves? -le muestra una parte del video en la que Chat noir usa su bastón para bloquear un ataque dirigido a Ladybug.
- Si -Marinette se sonroja- él siempre está allí para ella
- ¿Él te gusta?
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- ¡Qué! – grita y se levanta, todos voltean a verla- yo -baja la cabeza y se sienta avergonzada
- Yo creo que sí
- Alya deja las bromas
- ¿y por qué actúas tan raro cuando hablo de Chat noir?
- ¿Yo? -piensa- Debe ser tu imaginación
- ¿Es enserio?
- Es solo que él es muy genial, después de todo es un súper héroe.
- Si claro -le guiña un ojo- ya en serio
- Solamente que Chat noir es muy dulce cuando protege a Ladybug.
- Pero ella no parece demostrarle el mismo afecto, ¿te imaginas que fuesen novios? – Adrien había alcanzado a oír estos comentarios, de inmediato su mente se llenó de las escenas de Ladybug y él combatiendo a los villanos de París, él se preocupaba por el bienestar de ella, pero, ella sólo le había demostrado un sentimiento proporcionalmente parecido cuando se habían enfrentado a Phantom Queen.
- ¿Qué? -Marinette pensaba como sería si saliera con Chat noir, la verdad es que no parecía nada desagradable, al contrario, sus bromas y su carisma podrían alegrar cualquier día triste y gris. Sin embargo, esto sería imposible, su corazón tenía un único dueño, y ese era el chico que se sentaba delante de ella y por el que perdía la capacidad de articular una oración coherente. -Yo amo a Adrien (pensaba) por más que él no lo sepa, algún día se lo diré, yo me ganare su amor.
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- ¿Qué tanto piensas Marinette? -Alya se había acercado demasiados y la miraba con unos ojitos acosadores.
- ¿Qué? Yo nada -volvió a enrojecer
- Tranquila amiga
Así se pasó toda la hora de clases, Marinette contemplando a Adrien y fantaseando de vez en vez que lograba decirle lo que sentía, los dos se volverían novios y darían largo paseos por la ciudad,tendrían citas románticas bajo la luz de la luna y sería en la torre Eiffel donde tendría su primer beso. ¿Primer beso? -pensó- de inmediato recordó que siendo Ladybug había tenido que besar a Chat noir para poder derrotar al villano Cupido Negro. Ese había sido su primer beso a pesar de que ella no lo aceptaba,no debía siquiera contar porque Chat noir no lo recordaba debido al hechizo,así que ella también debía olvidarlo ¿no?, tendría que haber sido Adrien, eso sí sería memorable. Se imaginaba esa batalla y que el hechizado era su queridísimo Adrien Agreste -se sonrojó- luego de un momento volvió a la realidad, vio al verdadero Adrien que estaba entrando en su limusina y se despedía de ella a lo lejos. Marinette reaccionó luego de un instante, movió su mano con cierta torpeza y una sonrisa nerviosa se dibujó en sus labios. Siempre le sucedía lo mismo, no era capaz deser valiente y segura frente a él, no podía ser como Ladybug. El rubio entró al vehículo con esa sonrisa tierna que tenía cada vez que Marinette decía o hacía algo incoherente, parecía ya haberse acostumbrado a verla así, es más, le causaban cierta ternura sus gestos. Adrien se acomodó en su asiento mientras pensaba en su compañera de ojos azules y cabello oscuro, sus palabras trabadas, sus frases sin sentido, sus constantes rectificaciones y enredos para corregir lo que había dicho. Su recuerdo lo hacía feliz, después de todo ella había sido su primera amiga y su torpeza con el paraguas aquel día fue el inicio de una nueva vida para él; por fin se sentía como un muchacho real y común. Era por eso que pensar en Marinette lo hacía feliz, ella era única. De repente se dio cuenta de lo que pensaba, ¿era acaso que sentía algo más que amistad por ella?... se puso a reflexionar, Marinette era muy dulce y adorable pero su corazón ya tenía dueña, era Ladybug la que le quitaba el sueño por las noches, por la que luchaba como Chat noir todas las veces, cuanto hubiese querido decirle lo que sentía, pero el temor no le dejaba...los nervios lo inundaban cuando ella estaba cerca.
