D I E Z

71 10 0
                                    


Al atardecer, las sirenas y Fisher se encontraron con Rina y los presentaron. Él tenía miedo de que ella no se fijara en él por ser de otra especie. Tenía el corazón hecho puño, quería agradarle.

Cuando Rina vio a Fisher, vio un mojado cabello azul brillante y un par de ojos verdes... Había algo en su mirada que le robó el aliento, además de ser bastante atractivo. Parecía tímido, pero cuando le habló, sus oídos quedaron convertidos en miel. Había escuchado lo seductoras que podían ser las voces de las sirenas y tritones, pero nunca imaginó de qué manera.

Rina y Fisher © (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora