Un Encuentro (Taeyeon y Tú)

Inesperado

POV Evy

Esta chica había llegado y la había acompañado a la habitación de Tae, él quedo muy pálido al verla, por lo que me acerque a él.

Evy: estas bien?, quieres algo de tomar.

Tae: quiero que se vaya.

Evy: pero cariño vino a visitarte.

Tae: quiero que se largue!!!

Irene: creo que aun sigues enojado, después de años y veo que una de tus zorras te atiende.

Tae: no te permito que le hables de esa forma, ella es mi novia y te pido que la respetes.

Irene: vine en son de Paz Taeng, supe que te dispararon.

Tae. Que es lo que quieres, porque ahora.

Irene: no hay una razón en específico.

Tae estaba muy alterado su respiración estaba muy agitada.

Evy: te pediré amablemente que te retires, no se siente bien.

Irene: claro, estoy de vuelta en Corea, por si te interesa.

Tae: Vete!

La acompañe a la salida y ella me miro.

Irene: aun me odia, espero algún día hacer las paces con él, cuídalo.

Sin más se marchó, volví a la habitación y él estaba de pie junto a la ventana.

Tae: que fue lo que te dijo.

Evy: ¿quieres hablar de esto?

Tae: no debería afectarme, pero al parecer aun lo hace.

Evy: tranquilo... no tienes que hacerlo.

Tae: ella forma parte de mi pasado, ya no duele como antes, pero en su momento me hizo sufrir, ella fue la primera chica que me hizo sentir muchas cosas, fue mi novia, me había engañado, por eso me había vuelto un mujeriego, me jure que nadie más me podría hacer sentir triste...

Seguía mirando hacia la ventana mientras me contaba la historia, aunque en realidad me dijo que no había tantos detalles y solo me dijo lo más importante, ella había sido la culpable de que Taeyeon no haya querido abrir su corazón con las personas... se dio la vuelta y se fue acercado a mí, no deje que se agachara a mi altura, por lo que me puse de pie.

Tae: eso fue hace mucho, pero esos sentimientos volvieron desde el primer día que te hice mía, no podía dejar de pensar en ti, tu sonrisa, tus ojos, tus labios, me di cuenta que te quería a mi lado, aunque me costó mucho trabajo convencerme a mí mismo, al principio solo quería acostarme contigo otras ves, para entender que es lo que en realidad sentía, jamás en mi vida había puesto tanto empeño en un chica, ni siquiera lo hice con Irene, te has vuelto mi mundo.

Me había sonrojado con lo que me había dicho, lo abrace y una lagrima corrió por mis ojos, esto era muy lindo de su parte.

Evy: Eres muy cursi. *sonrojo*

Tae: solo para ti.

Me tomó de la barbilla, para dejarme un beso en los labios, que él mismo fue intensificando.

Evy: es-pera...

Tae: no puedo, amor te necesito.

Evy: yo también... pero.

Tae: por favor... estaré bien...

Evy: *suspiro* lo siento, pero no... te puedes hacer daño.

Hizo un puchero muy tierno que no me resistí en besar y después me salí de su habitación, porque si seguía ahí no dejaría de pedírmelo. Le dije que tendría que descansar, que solo sería un tiempo.