KILLER [Bangtan Boys]

XII

JungKook se encontraba aterrorizado y no paraba de removerse a pesar de las quemaduras que le provocan las cuerdas alrededor de sus muñecas y tobillos - ¡¿Por qué haces esto?! – Gritaba y no recibía respuesta, sólo más silencio frío y sepulcral, acompañado por sonrisas escalofriantes que nunca pensó ver.

La piscina se encontraba iluminado debido a las luces internas, haciendo que el agua se le reflejara en el rostro en una tenue onda, pareciendo más terrorífico - ¡Déjame ir, por favor! – Rogó el castaño, comenzando a sentir lágrimas escocer en sus ojos – Por favor – Su voz se encontraba mascullada debido al nudo que se había formado en su garganta. JungKook podía visualizar cómo se movía por el borde de la piscina, conectado cables y demás cosas que no sabía de qué trataba.

Hasta que todo aquello fue a parar al interior de la piscina.

- Yo siendo tú, no me movería tanto – Ahí lo entendió. El agua más los cables eléctricos, si llegara a tocar sólo un poco de la superficie de la piscina; se electrocutaría – Me caías bien, JungKook-ah pero, eso no es suficiente.

El castaño escuchó un sonido algo deslizado y un brusco movimiento. Subió la mirada un poco, examinando la cuerda que lo ataba a los tobillos, dándose cuenta que esta por el movimiento que se ha mantenido haciendo; se ha ido soltando de a poco.

- No...- Aquella simple negación salió con el miedo tan palpable que sólo provocó una escalofriante risa a la persona contraría – Por favor, no.

- Ya es tarde, - Pausó – mejor sigue mi consejo, no te muevas mucho.