Severine...mi princesa

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Las ideas y teorías expuestas en la carta son un resumen del libro "¿Free sex? La pregunta de hoy" y la saga "Los ojos de mi princesa" del ingeniero Carlos Cuauhtémoc Sánchez. Todos los derechos.


Alcanzar el avión de regerso fue una verdadera odisea y un verdadero fastidio para mí...el condenado de Carter nos demoró una hora por qué según él "tenía que empacar lo necesario" y cuando trajo sus maletas parecía que iba a mudarse de casa, traía como 4 maletas grandes llenas hasta el tope, 2 maletas medianas y una mochila, Dexter le reclamó:

-¡Carter te pasas en serio! ¡Vamos a visitar a Severine...no a ir de viaje al Congo!-

-Uno nunca sabe Lovelace...nunca sabe- dijo Carter mientras le ordenaba a su mayordomo (cuyo nombre me enteré que era Albert) que metiera las maletas en su limosina privada, al ofrcerme a ayudar a Albert por poco me rompo la espalda.

-¡¿Qué demonios guarda aquí?! ¡¿Piedras?! ¡¿Bludgers?!-

-Al señorito Carter le encanta viajar con "ligereza"-

De camino al aeropuerto Carter no hizo otra cosa que presumirnos sus logros en aeronáutica, transporte, agricultura, ganadería e ingeniería y robótica, ¡Fue insoportable! ¡Y yo que creía que los Malfoy eran presumidos...pero no le llegan ni a los tobillos a Carter! Tuve la sensación que tanto Lovelace y Albert se la pasaron en "piloto automático" al decir sólo una oración:

-No me diga Carter-

Al llegar al aeropuerto, nos demoramos una hora más al esperar que Carter comprara dos boletos extra y lograra meter su limosina en el avión, ya que según él no podía vivir sin su mayordomo y su limosina.

-Con lo que realmente no puede vivir es con su insoportable ego- me susurró Lovelace e hice una mueca de satisfacción.

Ya en el avión tuvimos que soportar otra de sus "platicas egocentristas" durante otra hora, pero al menos después de esta...se disculpó con nosotros y se puso a oír música y leer al mismo tiempo, para todos fue un verdadero alivio.

-Por fin cierrra la boca....si hubiera estado así una hora más...lo arrojo del avión- dije con hastío.

-No lo culpo- dijo mi amigo sonriéndome. Entonces vi que estaba escribiendo una carta a alguien, por el rabillo del ojo vi que le escribía a Severine. Dexter parecía muy concentrado en la carta y no quería que nadie lo viera escribiendo cosas cursis, así que me limité a mirar por la ventana el resto del viaje.

Al llegar a Londres, Carter no paraba de decirnos que conocía todos los detalles de la ciudad al dedillo y que era el dueño de la mayoría de las empresas de metalurgia y transporte...al menos cuando fuimos por el equipaje no paró de decirle a Albert que tuviera cuidado con sus maletas, Dexter y yo nos miramos entre sí....Realemente era un odioso presumido.

La limosina de Carter nos esperaba y volvimos a la misma rutina, al menos preferí hacerme el desentendido y observar la ciudad y a sus habitantes, aún no podía hacerme a la idea de que fuera el 2030 aquí y el 2014 en mi mundo....Autos voladores, autopistas en el cielo, esa cosa que los muggles llaman internet en cada esquina, construcciones imponentes y gente vestida de una manera muy estravagante...¿Algún día los muggles estarían igual o mejor que nosotros? No lo sabía...pero me moría por saberlo.

Soundtrack adecuado para cuando los protagonistas van en limosina hacia su destino. "Electric city" de Black Eyed Peas.

Finalmente la limosina dio una vuelta cerca de una fuente que se encontraba afuera de unas rejas blancas que dejaban ver una casa ostentosa  de dos pisos, con una alberca enorme pero bonita.  La casa de mi segundo o tercer admirador (contando a Albert).

Severus Snape y la princesa de ojos esmeralda (Las leyes del amor)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora