right hand

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You're my right hand, you're my go to
Told me everything about you
That's a bold move
I know that you're out here
And there's things you gotta go through
Just know that these streets just don't love you like I do
And they never will

 

Había pasado ya un mes desde que mis hermanos se habían mudado a Nueva Orleans. Y era feliz, muy feliz. Había conseguido controlar mis instintos vampíricos, podía ver a mis hermanitos todos los días y por fin teníamos el hogar que tanto habíamos ansiado.

Sin embargo, las cosas no iban tan bien para los Mikaelson. Cada vez estaban más y más amenazados, por Tristan de Martel y su hermana psicópata, Aurora.

Y en cuanto a mi, tenía algo por dentro que me carcomía. Sentía que necesitaba contarle a mi hermano que me había convertido en vampiro. ¿Cómo iba a explicarle en diez años el por qué de no envejecer? Necesitaba contárselo cuanto antes.

-¿Cómo crees que debería decírselo? -pregunté a Klaus, el cual estaba llevándome en coche a la casa de mis hermanos.

Klaus se encogió de hombros.

-No importa. Matt te apoyará a pesar de esto. Es tu hermano, seguirá queriéndote. Y en cuanto a los peques, dales unos cuantos años. Aún son muy pequeños para este mundo.

Asentí, llevaba razón. Aparcó el coche frente al piso, y supe que tenía que bajar y enfrentarme a mis temores.

-Puedes hacerlo -dijo convencido.

Le miré y se acercó a mi. Acortó el espacio que había entre nosotros y juntó nuestros labios en un suave y cálido beso. Llevaba mucho tiempo sin besarle, y pese a que no teníamos nada, lo había echado de menos.

-Klaus... -susurré apartándome unos centímetros, recordándole que esto estaba mal.

-No hay nada malo en esto, Brooke.

-¿Tengo que recordarte que Aurora está obsesionada contigo y que supuestamente tú sigues queriéndola?

-Es una farsa. Mis sentimientos hacia ella se apagaron hace siglos.

Cerré mis ojos, y Klaus volvió a juntar nuestros labios muy levemente.

-Solo tenemos que ser discretos. Saberlo tú y yo, y nadie más.

Y asentí, porque por una vez, iba a ser egoísta y hacer lo que quería. Llevaba mucho tiempo anhelando estar con Klaus, y aunque ahora probablemente fuese el peor momento para ello, me conformaba con una peligrosa relación secreta.

Le besé levemente, sellando nuestro pacto secreto.

-Te veo luego -susurré.

Klaus asintió y salí del coche con una pequeña sonrisa. Usé mi velocidad vampírica para llegar a toda velocidad a la puerta de la casa de Matt.

-Hey, Brooke -me sonrió Matt al abrir la puerta.

Le di un beso en la mejilla y entré a la casa.

-¿Están los niños aquí?

Mi hermano mayor negó con la cabeza.

-Están en la casa de al lado, con sus nuevos amigos.

Sonreí ampliamente, ante la idea de mis hermanos jugando con sus amiguitos.

-Esto es increíble -sonreí-. Les has conseguido apartar de toda esa mierda tóxica de Nueva York.

Matt se acercó con una leve sonrisa.

-Lo hemos hecho los dos, Brooke. Jamás habría podido sin ti.

Le di un pequeño abrazo y recordé el motivo de mi visita.

-Matty, tengo que contarte algo -susurré.

***

Matt no daba crédito, ¿cómo iba a hacerlo? Le entendía perfectamente. Recordé mi primera experiencia con el mundo sobrenatural, pasé un mes en el manicomio por culpa de unos vampiros que mataron a todos mis amigos. Le conté a Matt todo, de principio a fin, y pese a que no quería creerlo, sabía que tenía sentido.

-Todo esto es tan extraño... -susurró-. ¿Cómo se supone que tengo que aceptar que mi hermana sea una vampira? Esto suena como una broma sin gracia.

Me puse en pie y me acerqué a él. Solo había una última forma de hacer que me creyese. Dejé que mis colmillos saliesen y las venas de mis ojos se marcasen mientras mis ojos se teñían de rojo oscuro. Los ojos de mi hermano parecía que iban a salirse de sus órbitas. Subió una mano y tocó levemente, con cuidado, las venas bajo mis ojos.

-¿C-cómo...?

Volví a tener mi cara normal, y Matt apartó la mano.

-No voy a hacerte daño, ni a ti ni a los niños. Ni a nadie. No soy mala.

Matt asintió.

-Lo sé. Sé que no me harás daño.

Sonreí levemente, sabiendo que seguía teniendo la confianza de Matt.

-Te quiero, Matty.

Él asintió y me abrazó con fuerza.

-Y yo a ti, hermanita. A pesar de todo.





Capítulo cortísimo, lo sé. Pero Klaus y Brooke por fin han decidido dar un paso (uno diminuto) en su relación, y tener algo más que una amistad. Aunque tampoco os emocionéis mucho, no significa que ya sean novios o algo así. No he entrado en muchos detalles con la relación de Klaus y Aurora en este capítulo, pero en el siguiente averiguaréis lo complicada que va a ser la relación entre Klaus y Brooke.

Por otro lado, ya tengo pensado el final de la novela, y ya os voy avisando que va a ser intenso. No quedan muchos capítulos para el final, y me entristece porque esta es la primera novela que me he animado a subir a wattpad.

He estado mucho tiempo actualizando poco, pero es porque perdí por completo la inspiración. Sin embargo, la he recuperado asi que no creo que vuelva a tardar tanto en actualizar.

Brooke | Klaus MikaelsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora