🌸Capitulo 1: El relleno de la dona 🌸

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Ser la nerd de la escuela tiene sus virtudes.

–Se le otorga el reconocimiento en primer lugar de robótica –

Y desventajas...

–Hey~ neeeeeeeeerd!– Amatista, bastante linda pero con una forma de ser espantosa...
–Veras, no entendi nada de lo que la profesora de matemáticas a explicado– ya ni siquiera es necesario que me amenace como al inicio del ciclo escolar.
–Ya se a que te refieres, pasa en la noche a mi casa por ella, o mañana te veo en la entrada.– solo continúe mi camino y ella agitó su mano despidiendose como loca.

Las clases suelen ser aburridas, la mayoria de las cosas mencionadas las se de pies a cabeza, me relaja más la biblioteca...

–Estupida cosa...– hoy en definitiva no es mi día, el libro que más necesito se encuentra en la parte más alta del estante y mi tamaño no ayuda para nada.

–Solo un poco... Más!?– la pequeña escalera que e escogido falló, casi pude sentir el golpe en mi espalda.
–Y por eso no puedo creer que me hayas ganado el primer lugar.– esa forma de hablar tan arrogante.

–Vamos Perla, es hora de que me cedas la presidencia en el club de robótica– le sonreí de forma triunfante mientras baje de la escalera.
–Ah claro, te la daré cuando Jasper deje de hacer ejercicio – me bajo el libro de pasta blanca.

–¿matemáticas para principiantes? Sonara raro de mí pero, no creo que necesites esto.– oh no, si se entera y reclama a amatista sin duda estaré muerta, –No, e-esto es... ¡para mi vecina! ¡SI! Es que... Es muy pe-pequeña, y quiere aprender...!– bravo Peridot, eres un asco para mentir.

–Oye... Se que somos rivales pero nos conocemos hace un tiempo, alguien... ¿te intimida?– para mi colmo es bastante inteligente... No hay remedio.
Deje caer el libro y mientras ella lo recogió opte por salir corriendo.

Muchos pensaran, pobre Peridot es débil, aunque todo lo contrario, lo hago por ellas, es más que obvio que la tonta de Amatista quiere a Perla, pero esa flacucha pálida es demasiado presumida, no digo que las ayude, pero tampoco quiero que estén peleando por mi culpa, ¡ademas! A ambas las aprecio aunque no sean mis amigas...

–Pero si soy idiota!!!– yep! Perdí las llaves de mi casa. Mis padres viven en la ciudad de junto, somos de una familia humilde, pero bonita.

–Hey peridactilo!.– lo que me faltaba, sentarme a pensar en como entrar había tomado más tiempo de lo previsto. –No hice tu tarea si es por lo que vienes, tampoco la mía, y tengo hambre... Así que... Que carajos quieres?!.– mis cambios de humor son algo espontáneos lo se, pero muy lejos de ver a una Amatista enojada comenzó a reírse a carcajadas.

–Tranquila Peri, te traje esto.– puso frente a mi una cajita con ese logotipo de su familia, –Son de las nuevas, pero deberías tener cuidado, una la hice yo.– su familia es dueña de la repostería con los productos más deliciosos de la ciudad. –Oh, gracias salvaste mi... vida?.– eran donas... Pero donas con relleno, ¿¡Que diablos pasa en ese mundo!? Las donas son conocidas por ese pequeño agujero en el medio... Pero esto es... ¡Blasfemia!.

–No les mires tan feo, tampoco es como si la hubiera hecho con veneno.– de ti... Es bastante dudoso. Pero no me voy a poner arrogante, comida es comida, tomare la más bonita. –Esa la hizo mi madre, el relleno creo que es de crema de almendras, olvidando tu hambre... ¿Que haces ahí sentada? No me digas...– Oh no... Esa mirada.

¡No tan dulce!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora