seis.

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Helena sabía que algo no andaba bien ni con Kenneth y ni con Sara y Héctor ya que estos dos últimos andaban muy raros, sobre todo Sara ya que ni siquiera había ido a invitarla algún lado o algo así... Es más ya ni le había pedido sus apuntes, si que estaba rara. Y por otra parte Kenneth andaba algo raro pero de esa rareza mala ya que este se comportaba aveces serio o muy "amable" con ella y la verdad su que era muy, muy raro eso, porque de repente le decía algún comentario bastante burdo o luego uno muy amistoso y todo desde la vez que Sara apareció en el café y ella esperaba que la nombrada no tuviera nada que ver.

Y bueno Helena ya se había dado cuenta de estos cambios desde ya había un par de semanas o hasta más y por más que queria preguntar no encontraba la oportunidad o no sabía cómo hacerlo, pero no era como que quisiera quedar bien con Sara o Héctor si no que con quién quería estar bien era con Kenneth, el cual ella ya bien sabía que comenzaba a tener gratos sentimientos por el susodicho, pero apesar de ellos no los quería admitir por miedo a que los hicieran como quisieran.

Ese día fue tranquilamente al café, sin muchas ganas, ya que sentía un pesar en su pecho, sabía que algo no iba a salir bien, pero ella esperaba que todo fuese producto de su imaginación.

—!Hola Kenneth!. —Llego muy animadamente al café.

—Hola. —Hablo con desgana el chico, dando a notar el "poco" interés que tenía su precencia en ese momento.

Helena en ese momento sintió una punzada en su pecho nada grato, haciéndola sentir mal, ya que era la primera vez que el la trataba así.

—Si, hola. —Repitió por lo bajo Helena. —Me podrías dar lo de siempre por favor. —Pidió con amabilidad.

—Si, permíteme.

Le preparo su café americano y recibió el dinero exacto del cafe con desgana.

—¿Que tal has estado? —Pregunto Helena, tratando de sonar tranquila.

—A... Lo normal, ya sabes.

Helena entre cerro los ojos molesta, bebió de su café y se quedó callada por un rato.

—Aaaa lo normal. —repitió para si misma y en forma de reclamo. —Eso esta bien....

—Si.

El ambiente era bastante raro para los dos, pero más para Helena que se le hacía súper incómodo y fastidioso, y ya harta de esa actitud tan cagada decidió poner cartas en la mesa.

—¿Me podrías decir que es lo que te pasa? —Pregunto molesta.

Kenneth la miro de reojo, llevando su mirada a otra parte de la cafetería, mientras soltaba un suspiro.

—No me pasa nada, la verdad no entiendo tu pregunta.

Helena le miro con un horrible enojo que quería golpearlo por dos razones, una por que se sentía lastimada y la otra porque...

—Claro que te pasa algo, y no me quieres decir, ¿no se supone que somos amigos? —exclamo ya algo alterada.

La mirada del chico fue directamente hacia la mirada de Helena, y sabiendo que no debía de abrir su estúpida boca lo hizo sin tener cuidado de sus palabras.

—¿Amigos? —la miro con Mucha seriedad. —yo nunca e dicho que somos amigos... Y estoy más seguro que nunca lo seremos, ni eso y ni algo más, la única relación que tu y yo tenemos es cliente y su "servidor".

Helena lo miro callada, no diría nada más y ni pretendia arreglar o aclarar algo ya que todo era más que obvio, así que se levantó de su asiento se dió la vuelta y desapareció al salir de la puerta del lugar, sin tener alguna clase de intención de regresar.

*"*"*"*"*"*.

Kenneth al ver a Helena salir sin rechistar nada, sabía que la había cargado, sólo por haber tenido un "mal" día y todo eso a causa de ese tal Héctor que le fue a amenazar con que la dejara ya que ella era su novia y esto le calentó bastante la cabeza durante todo el día hasta su llego Helena.

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