Nuestro Viaje

Capítulo 12: Uchiha

Muchas parejas de la generación de Naruto se han casado todos felices y juntos exceptuando a Sasuke y Sakura, ellos aún eran pareja.

El azabache estaba totalmente agotado en su cama por una misión que tuvó el día anterior con el rubio. Mientras seguía aún dormido unos ruidos de la puerta llegaron hasta su oído haciendo que se levantará con toda su flojera, al llegar hasta la puerta vió que era Naruto.

-¿Qué haces aquí Naruto?- preguntó el Uchiha con el ceño bajo, todo el sueño lo invadía al pobre

-Nada, sólo pasaba por aquí por unas cosas que me había dicho Hinata que consiguiera. Por suerte pasé por tu casa Dattebayo- dijo el ojiazul con su tono de voz como siempre

-Hmp si quieres pasa- dijo el pelinegro haciendose un lado para que Naruto pasará

-Ah claro- contestó el rubio y pasó con unos pasos lentos

Naruto dejó lo que había comprado y se dirigió hacia a donde estaba Sasuke. Hablaron por un buen rato cuando de repente el Uzumaki sacó un tema haciendo que el Uchiha estuviera pensando demasiado.

-Oye Sasuke, ¿qué harás hora que eres pareja de Sakura-chan?- preguntó el rubio con un tono no tan serio mientras se apoyaba de la mesa en la que estaba

-Hmp, no es de tu incumbencia. Aún no sé que haría- dijo el azabache apoyandose otra vez de la mesa pero esta vez cerrando los ojos

-Pueden casarse ¿sabes?- dijo el ojiazul dejando de apoyarse y poniendose de brazos cruzados

Al escuchar el pelinegro las palabras de su mejor amigo quedó un poco sonrojado y a la vez congelado, no sabría que haría si casarse o esperar. Como quedó congelado el Uchiha recibió un golpe del rubio haciendo que despertará.

-Oye maldito ¿qué demonios te sucede?- preguntó el azabache confundido, un poco enojada y tocandose la herida en su mejilla

-Si amas demasiado a Sakura-chan no dudes, casate con ella Dattebato- dijo el ojiazul al dirigirse hacia a la puerta y cerrando la puerta con calma

La casa del Uchiha estaba totalmente en silencio más que Sasuke no dejaba de pensar en lo que le había dicho Naruto; de tanto pensar decidió ir a bañarse. Las gotas de agua caían en él, aún sintiendo el agua no dejaba de pensar en aquello de casarse; al terminar se pusó la ropa que siempre llevaba y fue a caminar para despejarse.

Durante en el camino se sentía tranquilo y había decidido que si se casaría. Fue a comprar un anillo y luego se dirigió hacia a la casa de la pelirosa para darselo, parecía que ya quería estar a su lado por siempre. Al llegar a la  casa de la Haruno estaba algo nervioso por decirle que si quería ser su esposa, su rostro era serio como siempre pero tenía un poco de sonrojo, no abría así que se fue cuando alguien lo jaló de la capicha negra que tenía.

-Hola Sasuke-kum- dijo la ojijade con un tono apresurado y con una sonrisa

-H...hola ¿qué te sucede?- preguntó el Uchiha al dirigir su mirada hacia a su amor

-Nada, es que tomé una ducha y pues cuando tocastes apenas estaba saliendo- dijo Sakura poniendo sus manos atrás y juntas- ¿Quieres pasar?- preguntó con una sonrisa y con los ojos cerrados

-Hmp, vale- asintió el pelinegro con unas pocas palabras

Sakura recibió a Sasuke como a un buen huésped, le dió un cafe y lo hizó sentir bien. Hablaron un poco haciendo que la pelirosa esté feliz.

-Oye Sakura- dijo el azabache un poco sonrojado, no era de esperarse que Sasuke se sonrojarse

-¿Qué pasa?- preguntó la pelirosa al dejar el cafe que se había preparado