CAPÍTULO 32

1.6K 90 8
                                    

Despierto con un horrible dolor de cabeza, mis manos están aferradas al pequeño cuerpo de Addison y todo un mar de recuerdos inunda mi mente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Despierto con un horrible dolor de cabeza, mis manos están aferradas al pequeño cuerpo de Addison y todo un mar de recuerdos inunda mi mente.

Como la vi al entrar, como me apartó y gritó de esa manera, mis brazos rodeándola y sus pequeñas mejillas sonrojadas y recostadas en mi pecho hasta terminar profundamente dormida.

Recuerdo la noche...nada más allá de abrazos y caricias relajantes, y aún así me siento tan bien...Ella sigue dormida, mi pecho mece con suavidad su cabeza, que sube y baja con tranquilidad con el suave ritmo de mi respiración.

Sus ojos están cerrados, y aunque no lea sus pensamientos, sé que ahora duerme tranquila y en paz.

Intento recordar cada hermoso detalle de ella de la noche anterior, su sonrisa tranquilizadora que me haría mover cielo y tierra para verla un vez más, su suave cabello color chocolate pegado a su rostro de manera tierna y angelical...¿Qué me ha ocurrido?

Y pensar que hace tan solo tres meses trabajaba de stripper...es algo tan sub-realista.

La luz del día atraviesa las ventanas de esta modesta cabaña, ningún ruido más que el de la naturaleza se oye en el lugar. 

Esto me lleva a pensar ¿Cómo sería una vida con Addison?

Mis palabras exactas de anoche fueron "Me casaré contigo. Te lo prometo"

¿De verdad lo haría o solo fue para calmarla?

¿Estaría dispuesto a hacerlo?

Yo diría que si, pero ella es demasiado joven aún tiene 17 años.

Esto me lleva a pensar cuando cumple los años, quedan tan solo unas dos semanas y curiosamente es un día después de nuestro "aniversario" de cuatro meses. Pero ni siquiera le he pedido que sea mi novia oficial, ¿Hace falta?

Sé que ella no me lo diría, pero también sé que le gustaría llamarme "novio" de manera oficial. Pero si tengo que hacerlo, será bien y no de cualquier manera, ni en cualquier lugar. 

Quiero hacerla sentir especial, que piense "¡Joder de verdad le importo!" 

¿Pero que podría hacer?

Dos semanas para investigar no están tan mal ¿no?

Mi preciosa chica se mueve entre mis brazos, su cara se despega de mi pecho y se libera de mis brazos estirando los suyos. Tarda un momento en analizar el lugar, para luego mirarme y que una cálida sonrisa inunde su cara.

Le sonrío de vuelta y acaricio su cara, me acerco lentamente a ella y rozo sus suaves labios con los míos humedenciéndolos a mi paso. Junto su boca con la mía y un beso profundo se hace con todo mi auto control.

Nos lleva un segundo recobrar la respiración, sus mejillas están rojas, su cabello revuelto mientras lo acaricio suavemente y su pecho sube y baja intentado que el oxígeno llegue a sus pulmones.

MIKE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora