Incompleta.
Extrañamente así es como me siento, pero no de una manera dolorosa y poética, simplemente lo siento. No estoy segura de que sea lo que me hace falta, quizás sea su presencia o simplemente son imaginaciones mías. No me sorprendería que fueran imaginaciones mías, porque no sería la primera vez. Pero esta vez se siente diferente, nunca antes me había sentido así.
Trato de expresar mis sentimientos pero para que otros me comprendan hay que comenzar desde el principio, desde el momento en que las cosas cambiaron. El momento en que me di cuenta de que ya no era rutina, sino que una búsqueda de ambas partes. De mi hacia él, de una manera mínima y de él hacia mi de una manera muy intensa. Ya es notable el desnivel en esta situación.
Como muchas historias de la actualidad, todo comenzó en la escuela. En el último año, el año en el que ya algunos tienen sus dieciocho años, algunos ya han tenido sexo y otros ya fueron aceptados en sus futuras universidades. La llamada edad de los errores y riesgos, aunque algunos se toman esto muy enserio.
Por mi parte, en ese momento no estaba pendiente a las cosas que la mayoría de mis compañeros. Yo estaba más concentrada en graduarme con honores, pasarla bien con mis amistades y tratar de conquistar a mi crush, algo bastante fallido debo decir. Nada muy impresionante, pero tampoco rutinario. Nunca fui una persona aburrida, siempre busque la manera de hacer reír o activar a las personas, pero tenía la mentalidad de una persona adulta. Esto no es suposiciones. A la edad de ocho años me hicieron un estudio psicológico en el cual determinaron que mi edad metal era de una de dieciocho años, pero ya me estoy desviando del tema.A pesar de mis grandes fracasos amorosos en el pasado, que fueron varios, siempre he tenido la imagen en mi mente de un chico que este realmente loco por mi y que sea una buena persona en todos los aspectos. Ese hombre perfecto que en muy pocas ocasiones existe o encuentras. No es un deseo extraño o único, muchas también desean esto, solo que cada persona es distinta.
El problema estaba en que deseaba tanto la llegada de ese chico perfecto, que no me di cuenta de que para alguien más yo era su chica perfecta. En ese momento mis ojos estaban en otra persona, alguien que en ocasiones pareciera que yo le gustó también, pero luego parece que no. Una incertidumbre completa, pero como tonta del momento, no salía de allí. Puedo decir este tipo de cosas ahora, porque ya el tiempo a pasado. Es imposible saber como saldrán las cosas y siempre queremos cambiar el pasado, aunque sabemos que es imposible.
En el momento me era imposible pensar que yo fuera perfecta para alguien y aún lo sigue siendo hasta el día de hoy. Es como algo que en mi mente no existe. Y cuando trataba de imaginarme como nos veríamos juntos, algo que todo el mundo hace y no traten de negarlo, esto empeoraba. ¡Éramos completamente distintos! Él de piel blanca, yo de piel morena, él delgado y yo con curvas. Esto no tiene que ver con cuestiones raciales, es que éramos muy diferentes a simple vista. ¡Incluso yo soy más alta que él! Cualquiera en mi situación hubiera notado las diferencias y ahora se que gracias a mi ignorancia de la adolescencia, le di demasiada importancia a esto y no a las verdaderas intenciones. Y esto me duele y ni siquiera se porqué. Es como si quisiera redimirme, pero sin saber como.
Ultimamente estos recuerdos navegan por mi mente. ¿Qué hubiera pasado si le hubiera dado una oportunidad? ¿Qué hubiera pasado si ignoraba las opiniones de mis amistades?
¿Qué hubiese pasado?
Preguntas que nunca podré responder, pero que siempre me atormentan.Hoy en día estoy estudiando en la universidad a punto de graduarme, y no he sabido nada de él desde aquel verano hace dos años. He salido con varios chicos, incluso llegué a tener una cita con mi crush de la escuela, pero resultó que los amores platónicos te ciegan la vista. El tipo no era tan bueno como yo lo veía en mi cabeza. Quizás eso pasa cuando quieres tanto algo y sabes que no lo puedes tener, creas esta imagen perfecta en tu mente que en ciento modo, te hace sentir bien. La realidad es otra, pero, de eso se tratan los amores platónicos o "crush".
No voy a negar que a veces, cuando estoy en una cita con algún chico, no puedo evitar pensar: "él nunca hubiera hecho eso" " él me hubiera tratado mejor"
Pero ÉL, no está aquí y está mal que siga comparando a otros chicos con el.Yo dejé que se fuera. Yo no quise ver la realidad. Yo perdí la oportunidad. Yo lo perdí a él y tengo que vivir con eso.
ESTÁS LEYENDO
Quiero Que Regreses
Teen Fiction(COMPLETA) [Historia Corta] Lo tenía justo ahí, frente a mí. Solamente para mí y lo deje escurrirse entre mis manos. Él nunca se rindió, a pesar de todo y no lo pensé bien. "Volveré en verano, espérame". No eramos nada, ni siquiera sé si lograriamo...