Tú Eres Mi Hermoso Destino. [Rarijack]

5. ¡Decirte Qué...!

- Yo... La verdad es que... - Tomó todo el aire que pudo. - C-Creo que... Creo que me estoy enamorando de tí. - Murmuró sonrojada hasta las orejas.

Un pequeño silencio reinó en el lugar, Rarity bajo la mirada y se mordió el labio tratando de buscar las mejores palabras para expresar su sentir. Applejack por el contrario, comenzaba a arrepentirse de haber revelado sus sentir, y justo cuando empezaba a desear que la tierra se la tragara, la diseñadora levantó la vista y le sonrió dulcemente.

- ¡Me siento halagada que una chica como tú se halla fijado en mí. - Habló colocado sus manos en los hombros de la vaquera. - Y debo confesar que... Yo también... Me siento de la misma forma por tí. - Murmuró sonrojada.

El corazón de Applejack palpitó salvajemente que llegó a creer que se saldría de su pecho, con delicadeza paso su brazos en la cintura de Rarity, acercando sus cuerpos y apoyo su frente en su hombro.

- S-Se que no soy la mejor opción que podrías tener pero... Yo quisiera... Quisiera intentar tener una relación contigo... - Pausó unos segundos para tomar aire y calmar un poco su corazón. - Se que no nos conocemos bien, pero estoy dispuesta a conocerte y a que me conozcas... Así que... ¿A-Aceptarias darle una oportunidad a esta chica que no sabe nada de moda o de etiquetas de dama?

Rarity sintió su corazón pugnando por salir de su pecho, alguna lágrimas atrevidas brotaron de sus ojos. Con sus manos trazó el camino desde los hombros hasta las mejillas de la vaquera, levantó su rostro para poder mirar esos ojos verde esmeralda que tanto anhelaba ver desde que la conoció.

- Applejack... Tal vez no seas la personas más fina y elegante... Pero eres mucho mejor que cualquiera de los pretendientes que tengo. - Dijo pegando sus frentes. - E-Es la primera vez que alguien me hace sentir estas emociones, por eso estoy casi segura que tú... Que tú eres mi opuesto ideal. Así que... ¡A-Acepto! - Exclamó nerviosamente.

Applejack sonrió con emoción y le dió un beso en la mejilla, para después abrazarla fuertemente. Rarity correspondió el abrazo, y ambas se quedaron así por un rato, disfrutando de la compañía de la otra.

Mientras tanto no muy lejos de ahí, Twilight sonreía orgullosa de el proceder de su amiga, no había sido su intención escuchar la conversación, pero se sentia muy adolorida como para irse del lugar y sus oídos estaban bastante desarrollados, así que escuchó bastante bien. Con uno de sus brazos en la cintura de Pinkie Pie la sostenía apegada a ella y con su otra mano le tapaba la boca para evitar que interrumpiera aquel hermoso momento.

Después de una pequeña revisión de los doctores, las dejaron irse a sus hogares, sin decir mucho, cada uno se despidió y se dirigieron a sus hogares a descansar un poco. Ya estaba bastante entrada la noche cuando Twilight con ayuda de Pinkie llego a su casa.

- ¡Muchas gracias por ayudarme a llegar! - Agradeció sacando las llaves y abriendo la puerta. - Seguro que sola no hubiera pasado del cuarto paso.

- No hay problema, es mi deber como pareja el cuidar de tí, así como tú cuidas de mí. - Musitó con una gran sonrisa. - Bueno, me voy. Adiós Twilight. - Se despidió dándole un rapido beso.

- ¡E-Espera Pinkie! - La detuvó. - Ys esta bastante oscuro, y no me sentiré tranquila sabiendo que andarás sola en las calles de noche, asi que... ¿Porque no te quedas?

Pinkie parpadeó un par de veces antes de que una sonrisa pícara adornara su rostro. - ¡Oh! ¿Acaso deseas pasar una noche de pasión conmigo? - Exclamó abrazándose a si misma.