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|Scared.|

Y en medio del temor, de la sensación de su vida tendiendo de un delgado hilo, Agus acaricia con cuidado la cabellera plateada de Jimin, muerde su labio inferior para evitar sollozar y a pesar de que sabe que ha llegado el día, ese día al que tanto miedo le tenía, mantenía su último rayo de fortaleza iluminando el rostro empapado de Park. 

— Tengo miedo— La voz de Jimin se desvanece en un instante y el corazón de Agus inmediatamente se pulveriza. 

— Yo también, Jimin. Yo también. 

Mira hacia la nada en ese oscuro bosque, lugar en donde habían decidido permanecer con la esperanza de mantenerse a salvo. El silencio desgarrador que permanece intacto en ese lugar resulta una tortura que le hace agonizar. Incluso sus propias respiraciones contra las que luchaban por mantener desapercibidas, eran el sonido más fuerte de ese lugar. 

— ¿Crees que habrá otra vida después de esto? ¿Después de ti y de mí?

Y su rostro enrojece cuando intenta contener el llanto de nuevo, pero ha llegado a un punto en el que sus emociones ya no pueden ser retenidas por más tiempo. Su corazón estalla y perfora su pecho de formas dolorosas. El llanto se libera en cuanto los ojos vidriosos de Jimin le observan fijamente y en Agus ya no hay más fortaleza. 

Y lo único que se atreve a hacer es abrazar a Jimin con fuerza, hunde su rostro en su cabello y Park recuesta su cabeza en el pecho de Agus. El pánico les envuelve y cada una de sus acciones es una señal de despedida, un adiós indirecto. Esas palabras que ninguno de los dos quería decir. 

— Si tú te vas, para mí no hay otra vida después de nosotros. 

La sensación de dolor va más allá de lo que ambos conocían, de pronto ya no sólo es la sensación de necesidad que comienza a crecer cuando ambos saben el final que les deparaba, ya no sólo era aceptar la terrible realidad que estaba a sólo un par de pasos para llegar a sus espaldas, no era el miedo creciente que les dejaba sin aliento, era simple y sencillamente la agonía de saber que en cualquier momento, la vida de cada uno tomaría un rumbo distinto, sólo por haberse amado tanto. 

— Te amo, Jimin— Susurra Agus.

— ¿En la vida y en la muerte?— Y ahí está nuevamente, todo aquello que se repetían cada vez que alguno decía esa palabra. El mundo del pelinegro se desvanece y todo cae a sus pies, sus esperanzas se derrumban de inmediato y ese nudo que se formó en su garganta no le permite respirar.

— En el cielo y el infierno— Agus le toma de la mano y le observar directamente a los ojos.

— ¿En el llanto y la felicidad?

— En el bien y el mal.

— Amarte ha sido mi pecado.

— Y no me arrepiento.

Ambos saben que es el adiós, porque justo cuando el viento sopla con brusquedad y las hojas secas del suelo comienzan a crujir de forma espeluznante, pueden percibir en el frío que se cuela hasta sus huesos que ese es el momento. No podía evitarlo, no había forma de ocultarse más tiempo de lo inevitable, porque incluso bajo las piedras, ellos estaban expuestos. 

Finalmente están ahí, miles de sombras e su alrededor, amenazantes, ojos brillantemente rojos y dientes afilados, y cuando la luz lunar los ilumina, sólo puede ver a esas criaturas cumplir las ordenes por su castigo. Su piel grisácea y esos la forma en la que sus ojos le cegaban, no sólo les dejaba sin aliento, sino también sin defensas.

Los gruñidos que escapan de sus bocas ensangrentadas y la forma en la que sus puntiagudos dientes son liberados, son señal de ataque. Jimin se aferra fuertemente a Agus y se esconde a sus espaldas, ambos lloran, pero lo más predominante en ese momento son los sollozos de Jimin como resultado del pánico creciente que le hace temblar y está a punto de hacerle desvanecer. 

Un silencio basta para que sus sentidos de alerta despierten y sólo basta un respiro para que Agus pueda decir:

—Corre.

Ambos se mueven rápidamente, con el corazón latiendo en su garganta y su piel erizándose de inmediato. Ya no sólo es el miedo el incentivo que los hace querer escapar y salvar sus vidas aún cuando ambos sabían que era imposible, sino que, la necesidad de tenerse el uno al otro influenciaba también en el que se aferraran fuertemente a sus posibilidades.

Sin embargo, cuando creen que los han perdido y que por alguna razón tienen otra oportunidad, Agus observa a sus espaldas y todo está vacío, pero incluso cuando la acción tomó sólo una fracción de segundo, justo cuando se da cuenta del gran error, la voz de Jimin es la primera señal de su equivocación. 

—¡Agus!

Y en ese momento, siente que algo se escapa de su pecho. Justo cuando ve a esa criatura tomando a Jimin del cuello hasta elevarlo. Las uñas largas de ese animal perforan el cuello de Jimin y el bloqueo existencial que aparece en Agus no le permite racionalizar. El pánico que atraviesa el rostro de Jimin justo cuando su vida es arrebatada, es lo que hace que el pelinegro comience a llorar. 

—¡Jimin! ¡No!

Agus corre con fuerza e incluso cuando es consciente de que su fuerza es inferior, se atreve a desafiarlo, pero tan rápido como intenta dar el primer golpe, una criatura más aparece y rasguña su rostro, cayendo al suelo de inmediato. Es ahí, en medio de su panorama borroso y entre las voces distorcionadas que comienzan a invadir sus oídos, que lo último que logra ver es la forma en la que ambos le toman de la cabeza y de un sólo movimiento, quiebran el cuello de Jimin, acabado de ese modo con él.

Cuando el llanto sale disparado de sus ojos y el mismo se disuelve con su sangre, lo único en lo que puede pensar es el dolor creciente en su pecho, ni siquiera el el dolor físico, resultado de sus heridas, se comparaba con el deseo de morir a causa del sufrimiento emocional que su pérdida le dejó. 

Entendía entonces, que después del dictado de la sentencia, no había forma de recuperar una felicidad que era arrebatada en tan sólo unos instantes. Cuando lo único que existe en su corazón es un gran vacío y la esperanza es arrebatada por la ira, no hay manera de que pueda recuperar algo de lo que le hacía feliz. 

Su mundo estaba destinado a permanecer en un proceso en el que amar era sufrir. En donde Jimin dejó calma, finalmente terminaría dejando soledad...

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Jelou(?)♥

Wueno, no me salió muy bien que digamos, askjhalkdjd. Me distraje mucho viendo un par de vídeos y creo que se me esfumó la idea centrar que tenía para este capítulo y no logré recuperarla xdxdxd. 

De igual modo me esforcé, así que espero que al menos les haya gustado un poco(?)

Nos leemos después, no se olviden de votar y comentar. 

Les mando muchos besos y abrazos:3♥