Viernes 18 de junio del 2008
Luna, tú que me estás viendo desde lejos, ayúdame, que no puedo más.
Dame fuerzas para seguir adelante, acércate a mi, dame de tu luz majestuosa y divina. «No hay mucho que decir, todo estaba mal, me está yendo tan mal.»
Sin querer, puedo leer cada detalle de tú luz, de la forma en cómo estás brillando ahora mismo, querida luna. Tú tampoco estás bien. No brillas como otras noches, que iluminas las noches de los enamorados. No tienes ningún brillo ahora mismo, pero sé que no te puedo pedir algo que se que no tienes ahora mismo, ahora estás dando el poco de la luz que te queda ahora mismo a una persona que está en un callejón sin salida.
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Querida Luna
Short StoryEl por las noches iba a un bosque lejano de la ciudad, y se sentaba en la piedra más alta que hubiera en la cima de la montaña cuando necesitaba ala luna. Le contaba sus penas y le decía lo mucho que la extrañaba. El admiraba con cada detalle cada...