Querida Luna

Final.

Saque todo el aire que llevaba adentro, me sacudí de la tierra y me levanté, pude ver el atardecer era hermoso.

«Puedo morir en paz, ya no importa nada, no hay una razón por la cual siga luchando.»

Sin darme cuenta unas lágrimas fueron saliendo de mis ojos sin un permiso alguno. ¿Por que a mi? ¿Qué le hice ala vida para que me tratara de esa manera?

La adolescencia para algunas personas es la mejor etapa de la vida de un adolescente, pero se equivocan. Es la etapa donde muchos mueren, sufren pero siguen viviendo en alma muerta como si nada hubiera pasado.

"Soy muy joven para estar roto"

Me puse a reflexionar las adversidades que eh tenido en mi vida y en las "cosas buenas" pero no recuerdo un momento de felicidad; nunca tuve uno.

La única persona la cual me hacia feliz y me hacia sentir vivo, la vida me la quito. Me la arrebato de las manos, sin darme cuenta alguna ella ya no estaba.

Mi padre el cual yo creía que nunca me rompería el corazón lo hizo, rompiéndome en mil pedazos. Era mi héroe, mi ejemplo a seguir. ¿Por que papá? ¿Nunca nos quisiste a mi y a mamá?

Limpie mis lágrimas con mi manga del suéter que estaba sucia después de haberme acostado en la piedra.

«Ahora estas muerto para mi papá, gracias por romperme el corazón»

Mamá nunca fue mala, al contrario era una excelente madre que dio todo su amor, cariño y esfuerzo a su pequeña familia, no la culpo si yo hubiera estado en su situación no se que hubiera echo yo.
Siempre tan cariñosa, tan simple, y hermosa, ella tenía unos ojos que me daban paz y tranquilidad unos brazos que me hacia entrar en calor y en otro mundo. Ella no merecía esto ni lo más malo de este mundo.

Tome todas las cartas que le había escrito ala luna, o más bien dicho a Rose. Me pare en la punta de la montaña, agarré el encendedor y a cada una la fui quemando una por una. Las cenizas se esparcieron con el aire, sentí algo inexplicable dentro de mi, no se como describirlo de una forma pero me sentí libre.

Pude sentir el fuerte aire estrellando sobre mi cuerpo, cerré los ojos por un momento dejando mi cuerpo parado en la punta de la montaña más alta.

Pensé en todo lo que me había pasado, en lo que había sufrido y en lo que la vida me había arrebatado. Gracias a todas esas adversidades me había hecho una persona fuerte y derecha, madure, vi la vida de otra manera.

Rose, quiero creer que me estás viendo desde el cielo, enserio quiero creerlo. Eres mi ángel, mi luna, mi todo, después de todo este tiempo por fin tu y yo estaremos juntos.

Antes de irme de aquí, vi por última vez los árboles, las pequeñas casas que se veían como hormigas desde aquí arriba, vez el cielo, todo lo que me rodeaba. Aquí era hermoso pero no me puedo imaginar lo grandioso que será estar con el amor de mi vida y la mujer que me dio la vida.

Con una sonrisa me voltee y cerré los ojos dejándome caer desde la montaña mas alta que había.

"Querida Luna, te quiero decir que te ves hermosa desde donde estoy sentado, ahora todo esta bien y yo me siento bien, estás al lado mío, por fin. No sabes cuanto espere este momento. Ahora puedo decir que soy realmente feliz estando a tu lado, te amo hoy y siempre Rose. Siempre tuyo, Adam."