~esto será una mierda~ tomtord - mattedd [2016]

de como ocurrieron algunas cosas

(ALERTA DE CAPITULO CONFUSO.- este capitulo podría ser difícil de entender, pero les prometo que al final todo será claro(?)

-voy al bar- dijo tom tranquilamente mientras tomaba su billetera de la mesa de centro -no me esperen- bramó antes de salir de la casa

-y tom nos abandona de nuevo- dijo edd acomodándose en el sofá y prendiendo el televisor

-bueno, eso suele pasar- respondió matt.

Hace bastante tiempo el adicto a la cola y el narcisista se sentían incomodos estando solos, matt actuaba de forma extremadamente rara , y edd no dejaba de sonrojarse.

Pobres e inocentes enamorados.

-¿tienes algo en mente?- preguntó el de capucha verde escuchando todo el ruido proveniente de la cocina.

-voy a hacerme un sándwich ¿quieres uno?- preguntó el pelinaranja

-no quiero morir hoy, gracias- respondió edd

-¡hey! Eso es cruel-

-matt, admitelo, eres un torpe de mierda y en una de esas puedes mezclar todo con algo toxico, no quiero arriesgarme-

-un simple "no quiero matt" bastaba- bramó mientras salía de la cocina con su comida

Edd escupió su coca cola al ver que el narcisista estaba sin camisa, sus mejillas se pusieron más rojas que la capucha de tord y frunció su ceño antes de gritar avergonzado

-¡¿Q-QUE MIERDA TE OCURRE MATT!? V-VE A PONERTE UNA POLERA- intentó desviar la mirada del atractivo torso del mencionado.

Pero falló miserablemente

-edd, hace mucho calor como para llevar algo puesto, no sé como mierda puedes estar vestido sin morir- el pelinaranja se sentó muy cerca del de capucha verde, poniéndolo más nervioso aun.

-además, yo luzco muy bien sin camiseta, ¿Cómo me veo edd?-

-e-en un espejo matt- respondió el mencionado logrando así una mueca por parte del torpe.

-¿por qué siempre eres tan cortante conmigo?- matt se acercó más al castaño.

-n-no sé de que hablas-

-¡OH VAMOS!, ¡antes las cosas no eran así!-

-sigo sin saber a que te refieres-

-antes te dejabas abrazar por mi-

Edd titubeó.

-Nunca he dicho que no podías-

Matt frunció su ceño a pesar de la constante preocupación que tenía por no arrugar su ~perfecto~ rostro

-entonces abrázame tu - las mejillas del narcisista se tornaron en un rosa tenue mientras miraba al de capucha verde

-¿q-qué me darás a cambio si se puede saber?-

-no sé cómo se te ocurre preguntar eso, por supuesto que obtendrás mi hermosa y agradable compañía-

De primeras, el adicto a la cola se avergonzó horriblemente, pero a los segundos esa vergüenza se transformó en un valor igualable al de un ebrio.

Puso sus delicados brazos alrededor del cuello de matt y lo atrajo hacia si haciendo que este terminara recostado en el sofá junto a el.

Por supuesto, no pudo evitar ocultar el color carmesí que se apoderaba de su rostro, pero eso era lo que menos importaba en ese momento.