Cap. 8

2.6K 158 43
                                        

-Esto lo cambia todo-dijo el Jefe al ver como su pequeño "yo" estaba dormido junto a la pequeña Astrid.

Al decir eso, ellos se depertaron algo sorprendidos y apenados.

-Ah-Ah ¿Que-Que haces aquí?-preguntó el pequeño Hipo algo apenado.

-Venía por Chimuelo pero veo que no esta aquí entonces-se dio media vuelta para irse.

-Yo te acompañó a buscarlo-gritó.

-No Hipo, quédate cuidando a Astrid hasta que despierte.

-Pero-intentó convenser al Jefe pero...

-Es una orden Hipo-dijo sin más para después irse.

Hipo se quedo algo nervioso pero al ver a Astrid durmiendo, se tranquilizó y la empezó a cuidar.

El Jefe Hipo se dirigió a la casa de Gothi donde la encontró con su dragón, pero no se preocupo porque la vieja era de fiar.

-Gothi-la llamó-¿Como va la información que te pedí?-preguntó.

Narra Hipo

De lo que pude entender es que por fin pudo descubrir la manera de enviar a mi pequeño "yo" al pasado. Me siento feliz pero a la vez triste, saber que Hipo se irá es deprimente pero ya que.

Espero que cuando regrese, no pase nada de lo que podamos arrepentirnos.

-Bien y ¿Cuándo debemos realizar el "hechizo" ?-Gothi dijo que lo más pronto posible. Ellos no deben enterarse de todo lo que ha pasado y mucho menos Hipo.

Agradecí a Gothi y me fui con Chimuelo a la casa de mi madre como cada tarde.

Narra Hipo

Astrid despertó unos minutos después de que Hipo grande se fuera, Astrid se fue con su "yo" del futuro para cuidarla y a nuestro futuro hijo.

Decidí ir a ver a mi futuro "yo" , me estaba preocupando de ¿Como estaría nuestro tiempo? Me refiero al pasado.

Salí de los establos y le pregunté a medio pueblo de donde estaba el Jefe hasta que llegue a la casa de Gothi y me dijo que se dirigía a la casa de nuestra madre. Si Valka es mi madre, básicamente también es de él ¿no creen?

Me dirigí a la casa de Valka en busca de mi futuro "yo" .

Mientras tanto con Hipo y Valka...

-Hola Mamá-saludó a su madre.

-Hola Hipo y ¿El otro Hipo?-El Jefe se puso algo nervioso al oír eso.

-Hablando de eso Mamá-hizo un pequeño silencio-Tengo que hablar contigo acerca de el.

-¿Qué?-preguntó algo asustada.

-Mamá... el es yo-dijo seriamente.

-Hipo... no digas cosas que no pueden pasar-lo ignoro.

-Mamá, el pequeño Hipo y sus amigos son Yo y mis amigos del pasado. Ellos viajaron del pasado-dijo casi gritando.

-¿Que?-preguntó sorprendida-¿Y como es eso posible Hipo?

En ese momento Astrid entró a la casa al escuchar todo lo que decían. Ni Hipo, ni Valka les dio mucha importancia. La saludaron y continuaron con su platica.

-Ellos me contaron que el pequeño Brutacio dijo un tipo hechizo y aquí aparecieron.

-Ósea que... ¿Con que así eras cuando eras pequeño?-no pudo evitar sacar una lágrima.

-Si... creo que ellos vienen de la época en la que Papá ya me ponía algo de atención-dijo algo desanimado.

-No digas eso Hipo-puso sus manos en los hombros de su hijo-Tu padre intentaba ponerte la atención posible... ser Jefe no es fácil Hipo, y ahora más que nunca lo sabes.

-Si pero a esa edad todo era mi culpa, todos me odiaban, hasta Astrid - Astrid se deprimió al oír eso-Y el día que nos enfrentamos a Drago ManoDura, me comporté como si tuviera esa edad-se enojó-Gracias a eso mi Padre murió-gritó con furia-Ahorita estaría aquí con nosotros si tan solo no me hubiera comportado como el pequeño "yo" lo hacía-empezó a soltar lágrimas.

Astrid abrazó a Hipo, el cual correspondió.

El pequeño Hipo estaba detrás de la puerta, logró escuchar toda la conversación entre El Jefe y Valka. Cuando vio que Astrid se acercaba, mientras tocaba su abultado vientre, se escondió.

Narra Hipo

Todo era mi culpa, la muerte de mi Padre, era culpable de todo. Algo nació en mi... un gran odio. Pensé que con decirle todo lo que pensaba bastaría así que entre de golpe a la casa de Valka.

-Así que todo es mi culpa-entró el pequeño Hipo a la casa azotando la puerta.

Hipo grande se levantó y se secó las lágrimas.

-No se de qué hablas Hipo-dijo con tono serio. El Jefe no estaba de humor.

-Crees que no escuche tu platica con Mamá... la "señora Valka" no es una simple aldeana como tú dijiste-se empezó a enojar demasiado-Es mi verdadera madre.

Astrid se sorprendió al oír que su esposo le había dicho eso a su pequeño "yo".

-Hipo-llamó Astrid al pequeño Hipo-Lo dijo por tu bien.

-¿Pero porqué? ¿Porqué no me contaron la verdad?-preguntó casi gritando.

-Pensaba decírtelo-El Jefe hizo una pequeña pausa-Al saber que no podrías cambiar el pasado-el pequeño Hipo se ofendió.

-¿A que te refieres a que no puedo cambiar el pasado?-preguntó algo ofendido.

-A que no creo capaz a mi pequeño "yo" de esta edad poder hacer eso-contestó fríamente.

-¿Básicamente eras un idiota a esta edad?-preguntó seriamente.

-Si, por esa conducta es la que murió papá-contestó de igual manera.

-Hipo-reclamó Astrid.

-Tranquila Astrid-contestó el pequeño Hipo-Solo quiero decirte que no debiste haberte casado con mi " yo" del futuro. Crecí siendo un fracasado.

-No digas eso... todavía te falta tiempo para llegar a esta edad y no tienes porque criticarte a ti mismo, ni mucho menos al "tu" del futuro. Lo críticas sin saber todo lo que ha pasado todos estos años-dijo Astrid.

-No digas estupideces Astrid-dijo el pequeño Hipo-Sufrí más a esta edad por tu culpa si no lo recuerdas-gritó demasiado fuerte.

Astrid no pudo evitar recordar cómo es que ella maltrataba a Hipo cuando eran jóvenes. Volteo a ver a su esposo y tenía una cara triste y cabizbaja, esa cara era familiar para ella, esa cara la ponía cuando ella lo molestaba. No pudo pensar más en ello porque le dio un fuerte dolor en el vientre. Fue tan fuerte que cayó de rodillas al suelo. El comentario del pequeño Hipo le llegó al corazón.

-Astrid-se agachó su esposo-¿Te sientes bien?-preguntó muy preocupado. La logró ver con lágrimas en los ojos mientras se estremecía de dolor en sus brazos.

Astrid no pudo contestar de tanto dolor que tenía en el vientre. La cargó con delicadeza. Salió de la cábaña de su madre. Ahí se encontraba su amigo descansando. Vio la expresión del rostro de su amo y se levantó rápidamente.

Hipo monto a Chimuelo mientras cargaba a Astrid pero antes de salir volteo a ver a su pequeño "yo".

-No me importa de qué tiempo vengas o si eres yo-tomó aire-Si algo le llega a pasar a Astrid o al bebé -puso una cara de enojo y despreció- Te haré sufrir con mis propias manos-dijo para después ir con Gothi.

Un viaje al FuturoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora