-Hey!!! Despierta!!!-Escucho una voz, parecía de hombre-Vamos nuevo, hay que salir de aquí.
Abro mis ojos lentamente y allí me estaba mirando el hombre que me ayudo en la prisión, yo estaba alucinando.
-Tu...deberías estar muerto...-Digo curioso.
-Si...pero tu subconsciente cree que debes escapar de aquí...así que...aquí estoy.-Dice.
-No quiero escapar, simplemente quiero una muerte pasiva.-Cuento mientras me siento.
-Que pena, pero así no vas a morir...vamos...debes superar esto.-Dice intentando hacer que me levante.
Lo pienso un instante, todo lo que pase lo he superado, con consecuencias, pero lo he superado. Debo avanzar.
Me levanto lentamente para no abrir más la herida de mi abdomen, mi cabeza de duele.
-Por aquí!!-Dice indicando con su dedo una puerta-Esta un poco atascada, pateala!!.
Intentó correr hacia ella, me doy un pequeño impulso y la puerta se abre por la fuerza de mi patada, detrás de esta solo había destrucción, gente muerta, fuego y hoyos.
-Ven!!!-Me grita una voz femenina, yo miro.-Se acaba el tiempo!!-Es la mujer que me ayudo en el accidente del tren.
Con mucho dolor continuo mi camino, observaba como la bola de demolición se preparaba,corro aun más rápido, a pesar del dolor. De repente siento como la bola pasa por detrás mío destruyendo aun más el edificio, esto causa que me tropiece y caiga otro piso mucho más destruido, otra voz me habla.
-Debes matarlo-Dice una voz calmada-Tal como lo hiciste con mi asesino-Era la señora Holson a unos metros al lado de mi.
-¿Como lo hago?-Pregunto levantandome con dolor.
La señora Holson mira a su izquierda, yo observo y a la misma altura del piso estaba el hombre con la bola. Reviso mi bolsillo si aun tenia mi arma, la saco, apunto, él activa la bola un piso más arriba y le disparo, la bala le atraviesa su pecho y muere, pero la bola no se detuvo, esta destruyo el piso de arriba, yo corro a las escaleras con mucho dolor, abro la puerta y continuo.
Cuando iba a llegar a la puerta del segundo piso, mi cabeza me empieza a doler aun más, me apoyo en la pared, en ese momento una voz me dice:
-Cae...
Las escaleras se rompen y caigo hasta llegar a la puerta de salida para llegar a mi libertad, el piso uno, me duele el cuerpo, apenas me puedo mover.
-¿Por que no te mueres y ya?-Dice una voz infantil masculina.
Observo con dolor y en la puerta estaba el hombre que mato a la señora Holson.
-No te queda nada por que vivir, muérete ¡¡YA!!-Prosigue.
-...no quiero..., he luchado demasiado para morir en una situación así-Digo levantandome con mi sangre en todo mi cuerpo.
-Detente, alto, no puedes-Dice mientras paso por él hasta llegar a la manija de la puerta-¡¡DETENTE!!-Grita desesperado.
Me detengo un instante, un gran temblor se produce, giro la manija y llego a la recepción del edificio, la salida estaba frente a mi, toda destruida.
Camino lentamente, mi herida sangraba sin parar, una luz blanca me iluminaba, toda mi frente estaba manchada de sangre, avanzo sin parar, finalmente iba a llegar a mi destino. De repente aparece mi familia de la luz blanca, mi esposa e hijo me observaban con felicidad, camino más rápido para llegar a ellos, estiro mi mano, ellos también, cuando íbamos a tocarnos, desaparecen con el vidrio rompiendose, lo traspaso rápidamente.
Llego al exterior, me duele aun más mi cabeza, la luces, los policías, el fuego, todo me parece demasiado conocido, hasta que finalmente todo se vuelve negro.
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Una vida en la sombra
PertualanganSi fueras a morir, cual sería tu última aventura, accion, movimiento?...todos sufren por esto, pero cada uno muere de una forma única que nos lo concede el mismo...