La Apuesta© #1 |en edición|

010 | LOS GEMELOS FELLERS.

"Caigo muy rápido, aterrizo muy fuerte, perdono fácilmente y me preocupo mucho".

CAPÍTULO DIEZ
[Los Gemelos Fellers]

Abigail.

—Oye, ¿estás viva? –abrí mis ojos al escuchar una voz proveniente del otro costado de la cama. —¿me escuchas?

—Ugh, que rayos quieres, Dakota? –gruñí tapando mi cabeza con la almohada. —Un día más por favor.

—Lo siento por desilusionarte, pero tienes que ir a la escuela. A parte, tu maldita cosa no ha dejado de sonar. Al parecer, un tal Chase Fellers tiene un crush en ti o algo.

—¿Chase Fellers? –dije levantándome de golpe. —¡DEVUÉLVEME MI CELULAR! –chille al escuchar mi ringtone sonar.

—Ay si, ay si. Toma tu cosa, pero cálmate, si? –gritó Dakota empujándome lejos de ella.

—Buenos Días Abbie –escuché esa dulce voz que era como música para mis oídos. —Llevo 30 minutos marcando a tu teléfono, pero al parecer no querías atender.

—No, no es eso –dije tosiendo descaradamente. —Me acabo de levantar.

—Pues mala suerte, por que en 15 minutos paso por ti para llevarte a la escuela –y sin dejarme protestar, colgó la llamada.

—¿Qué dijo? –preguntó Dakota viéndome con los brazos cruzados.

—Vendrá por mi en 15 minutos –grite mientras corría al baño.

Necesitaba arreglar esta monstruosidad que tengo de cara en solo 15 minutos. Si logro hacerlo, necesitaré que me dan un Oscar, o aun que sea un Grammy. Por que tomará esfuerzo. Y mucho.

💌

—Chase vendrá por mi hoy, Madre –dije mientras comía rápidamente el cereal que había en mi taza.

—¿Chase Fellers?

—Si, el chico que tiene un hermano idéntico a el –grite mientras corría a meter mis libros en la mochila.

—¿Y ellos que hacen aquí?

—Estoy por averiguarlo –dije viendo la hora. —Nos vemos en la noche –besé su mejilla y salí del apartamento corriendo hacía el ascensor.

***
Cuando por fin el ascensor abrió en el lobby, salí de el casi corriendo.

—Buenos Días, Zane –dije mientras me dirigía hacia la salida.

Al salir, me encontré un auto deportivo color negro con un muy bonito chico dentro de el.

—Buenos Días –dije entrando al asiento copiloto.

—Buenos Días dulzura –contestó besando mi mejilla. —¿Que tal de borrachera?

—Créeme que con esos 15 minutos que me has dado para arreglarme, ni me he puesto a pensar en eso.

—Pues para haberte arreglado en solo 15 minutos, te ves muy bien –dijo Chase mientras conducía por las hermosas calles de Los Ángeles.

—Gracias –conteste arreglando mi mascara. —Me dirás entonces que haces aquí? A parte de venir a buscarme, por supuesto.

—Digamos que siempre tuve el sueño de venir a vivir a Los Ángeles y ser alguien del mundo de la farándula.

No pude evitar reírme al escucharlo decir "mundo de la farándula".