Amor por el hielo

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Elsa estaba harta de la actitud de su hermana Anna, cada vez que estaba molesta con Anna o por un problema en el reino, ella se iba a la montaña acompañada de Kristoff hasta el castillo de hielo que había hecho anteriormente, Kristoff siempre la acompañaba, entre muchas cosas que compartían en común como comer sardinas y comida un poco más salada y simple, a Anna le encantan los sabores dulces y fuertes.

Ambos compartían su amor por el hielo podían pasar horas hablando sobre hielo ambos hacían esculturas de hielo en la famosa montaña, al principio Anna se molestó pero desde que llegaron sus damas no le prestaba atención a lo que Elsa y Kristoff hacían solo se veía con su prometido en la noche cuando dormían juntos y en las comidas según Anna era más romántico, cuando se casara sus damas regresarían a sus casas así que pasaba mucho tiempo con ellas y Kristoff pasaba tiempo con su reno Sven, el hielo y Elsa.

Ambos se habían hecho muy buenos amigos, eran los tres Sven,Elsa,Kristoff al principo al reno le había molestado la presencia de Elsa entre ellos pero Luego le tomo mucho cariño, más cariño que jamás le habría tomado a Anna. Elsa pasaba momentos muy felices junto a sus nuevos amigos, era muy divertido hacer hielo todo el día mientras el repartidor de hielo oficial cortaba hielo.

-Mira esto Sven -dijo Elsa- es una reno mujer dale un beso- el reno y Kristoff se miraron y los tres comenzaron a reír, reían por cualquier estupidez que pasaba alrededor, a Olaf le molestaba esa relación Olaf pasaba con Anna y sus damas ya que era el consentido y el más escuchado entre ellas siempre lo llevaban a un lugar diferente o a una fiesta privada en la que sólo hacían ellas.

-Sven? Quieres una zanahoria? Ve por ella y Elsa la lanzó, pero la lanzó torpemente. -Su majestad lanza como niña- la molesto Kristoff. -Yo!? Soy la reina de Arandelle la que no se congela, yo no lanzo como niña!- le respondió con un tono burlón molesto, Elsa recogió la zanahoria del piso y se la lanzo en la cara a Kristoff.

Elsa le respondió desafiante -aún lanzó como niña?- Kristoff la miro, levantó la ceja derecha y se frotó la frente, ahí donde le había caído la zanahoria.

-Sigues lanzando como niña.- la miro e impulsivamente sonrió, corrió hacia donde estaba Elsa y la cargo, recorrieron todo el castillo lanzando bolas de nieve entre ellos, jugando como niños. -Jajajaja hoy me divertí muchísimo Kristoff, fue un excelente día -le dijo Elsa, Kristoff la miro a los ojos, Kristoff no sabe muy bien lo que pasa, pero esos ojos celestes lo miraron con un brillo único y perfecto.

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La sonrisa de Kristoff era tan perfecta, tan dulce, tan llena de amor eran de esas sonrisas que te llenan el alma por segundos pero no podían ser ella y Kristoff, jamás .... Anna .....nunca ...... Sería horrible....
La pobre salió corriendo pero Kristoff la agarro del brazo para no dejarla ir, ella se intentó soltar pero no podía y... Tampoco quería.

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Kristoff supo una cosa, no se había sentido así en mucho tiempo, nunca en su vida. con Anna era todo lindo y romántico pero nada más con Elsa era diferente lo podía sentir, cuando Elsa se estaba soltando la pensó en soltar pero nunca tendría la oportunidad de besarla, era ahora o nunca... Sólo un beso, un maldito beso era lo único que quería, quería sentirla junto a él, quería amarla por siempre pero no se podrá por que Elsa ama a su hermana más a que nadie en este mundo, y él... Él no tiene nada ni nadie a quien querer más que a Sven y a sus amigas Anna y Elsa.

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Elsa quería ser besada por Kristoff pero no esta bien, Anna la odiaría por siempre, jamás podría vivir por la culpa y con el odio de su hermana sería lo peor, ella y su hermana se peleaban mucho últimamente pero aún así era su hermanita, ella la quería muchísimo pero Kristoff la hacia feliz y le movía el piso.

-Por favor Kristoff si sientes algo por mi, por favor -le lloró Elsa- déjame ir te lo pido, si no me sueltas nos arrepentiremos de esto por siempre...-Kristoff sólo la miró y la besó.

Frozen: Libre seré (Sin editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora