Frozen: Libre seré (Sin editar)

El retorno de Hans

Los reyes del reino vecino de Arendelle, es decir los padres de Hans. Estaban esperando con mucha tristeza y rabia el retorno de su hijo menor. No sabrían que hacer con el príncipe. Jamás le habían prestado atención, ni siquiera sabían que le gustaba comer. Ellos nunca se preocuparon por el pobre Hans, por eso se sentían culpables. La reina adoraba a su hija Carlotta, la sexta por orden de nacimiento y la primera hija. Tenía más hijas:

- Sky

-Lucy

-Samantha

-Melissa

Mientras que su padre pasaba el tiempo con su heredero al trono, Harry Dussanberg. Los demás hermanos simplemente ignoraban a Hans por que siempre fue un poco raro y ridículo, comía chocolates y sándwiches, era un niño gordito y raro.

Los hijos del rey y la reina por orden de nacimiento son:

-Harry

-Simón

-Henry

-Giovanni

-Charles

-Carlotta

-Samantha

-Sky

-Lucy

-Maximilian

-Thomas

-Melissa

-Hans

El sabío rey del reino vecino. El rey James Dussanberg estaba consciente de que su hijo tenía problemas. Jamás se llevo bien con sus hermanos nunca tuvo ningún solo amigo. El resto de sus hermanos se llevaban muy bien entre todos pero ninguno le presto atención al pobre de Hans pero el rey tenía la solución perfecta, ya lo había consultado con sus consejeros y condes del reino (sus hijos y hermanos) todos aceptaron la idea. El pobre de Hans sería enviado a las islas de piratas, quiera o no.

~

Después de muchas semanas de espera regresó el barco del príncipe Hans, después de tanta espera, el retorno de Hans se había hecho realidad. Todos los campesinos y artesanos, e incluso los sirvientes del castillo lanzaron insultos al joven.

Pero a Hans no le importaba, se sentía vacío como al principio. Como siempre pero desde que planeo su ataque a Arandelle tenía algo en que pensar, necesitaba volver a atacar, volver a intentar robar otro reino a otra ilusa o a una vieja reina a punto de morir. Necesitaba esa adrenalina que vivió en Arendelle, pero ya nada importa, ya que será enviado a prisión o a la horca lo que el consejo de sus hermanos y tíos habían decidido, lo que sea menos humillante para la familia real

Nunca importaste Hans, jamás les importaste Hans- le repetía una voz, que lo atormentaba cada día desde que tiene memoria, a lo largo de los años le había cambiado el nombre, cuando era niño le había puesto guli luego piti pero su último nombre era soledad.

Pero no sólo extrañaba el plan que había hecho si no muy dentro de su alma, y que soledad le hacía acuerdo constantemente. Hans extrañaba a Anna pero el príncipe lo negaba, pobre estúpida jamás encontraría una igual en todo el mundo por que nadie era tan estúpida como Anna pero por alguna extraña razón le parecía linda la manera en que reía eso lo hacia sonreír, la habría besado pero su plan se habría destruido y Anna hubiera vivido aunque todos saben como acabó su famoso plan.

Hans fue llevado a la corte y su padre, el rey James le tocó juzgarlo como un traidor. -Que prefieres Hans? ya que eres un usurpador serás juzgado como un traidor a nuestros aliados, tienes dos opciones ser ahorcado como un vil delincuente o un exilio a las islas de los piratas en la cual terminaras muerto en una semana -se dirigió el padre del príncipe con una solemnidad impresionante- que decides Hans?-

-La isla -miro al piso Hans- quiero la isla de piratas-

-Muy bien príncipe -se dirigió a él, su padre- lo condeno al exilio joven príncipe Hans primero de su nombre. Y como es tu cumpleaños te regalo un barco.-

Al momento que el rey regalo el barco a su hijo la corte y el pueblo blasfemaron al rey acusándolo de aceptar la traición y abuchearon al rey. pero el rey, furioso mando a sus soldados a que disparen a todo aquel que insultare al rey o a su familia, muchos murieron pero al final el consejo y el pueblo aceptaron el trato.

Hans salió del reino con todas sus pertenencias esa misma tarde y jamás fue visto otra vez.

Unos dicen que murió ahogado con sus marineros que eran presos que habían sido condenado al encierro permanente otros dicen que lo han visto navegar por todo el mundo, sea como sea Hans jamás volvió y el rey James envió a su hija menor Melissa a la corte de la reina Elsa, se estaban solicitando doncellas y caballeros para proteger y aconsejar, respectivamente, a la reina de Arandelle.