Frozen: Libre seré (Sin editar)

Hacerte reina

Por alguna extraña razón a Anna le dolía la cabeza, parte de que tenía unas fuertes ganas de vomitar pero no tenía que vomitar, ya lo había vomitado toda la noche mientras Hans la ayudaba a vomitar «dormí con Hans pero como pude ser tan estúpida» -buenos días- sonreía tontamente mientras se levantaba Hans.

Anna, escucha lo que paso fue un arrebato- «si pero no significa que me arrepienta de nada de lo sucedido» -si estaba ebria, y no se que me paso, yo...- Anna se puso de frente, cara a cara con Hans -Hans ¿tu me amas?- «dime que sí y estaremos juntos» Hans miro a otro lado -no, ya te dije solo fue un arrebato pero no se va a repetir- «te amo más que a mi vida, pero no puedo amarte como quieres ser amada».

Anna se levantó furiosa y se vistió, Hans hizo lo mismo sin saber que estaba haciendo pero la siguió y de repente vio a Anna subiéndose por la borda, Hans corrió desesperado -noo!- la logro agarrar por la cintura y la giro -si te amo Anna, pero no puedo amarte como tu quieres, tengo una misión y la tengo que cumplir- la beso delante de todos sin miedo a que lo vieran, Anna lo abrazo sin entender -¿que misión?- Hans apegó su boca a la oreja de Anna y le susurró -hacerte reina-.

Anna y Hans caminaron por la borda agarrados de las manos, Anna se detuvo y lo miro confusa -¿a dónde vamos?- Hans sonrió de lado -a tu reino, a Arendelle- Anna lo miró confundida -¿para qué quiere tu padre hacerme reina? Yo no quiero, yo solo quiero ser feliz- Anna lo abrazo -¿qué harás después de hacerme reina, ¿serás mi rey?- se río -sabes que me encanta el mar, esto es lo mío- la beso en la cabeza -creo que deberíamos huir juntos al fin del mundo en tu barco- Anna lo miro a los ojos -Anna, podríamos ser novios hasta que lleguemos a Arendelle luego de la batalla me iré, y nos amaremos a la distancia-.

Lo prometo- levantó la mano derecha haciendo un juramento solemne -bueno, esta bien- la miro de reojo Hans mientras se hacía el serio, pero al final la tomó de la cintura y la levantó por los aires, Anna se río como loca y de tantas vueltas ambos se cayeron al piso -te detesto Anna- Anna se le acercó lentamente arrastrando sus rodillas y ensuciando el vestido.

No me digas- se burlo Anna -como puedes odiarme, amamos los sándwiches y el chocolate- Hans la miro y la beso -hablando de eso tengo hambre, vamos a la cocina-

cuando caminaban a la cocina se dieron cuenta que habían tocado puerto.

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Carlotta se acercó a ellos después de mucho tiempo -les deseó lo mejor, que sean felices- los abrazo con todas sus fuerzas y bajó del barco con las pocas cosas que había traído. Carlotta fue hasta el castillo que Giovanni decía que necesitaban un experto en el arte de la guerra.

Carlotta había viajado tres días en caballo hasta el castillo, el viejo estaba decrépito y sin un solo hijo, todos había muerto en una vieja guerra que nadie recordaba, así que la tomó por esposa y en lecho nupcial el hombre murió de un paro cardíaco, Carlotta se quedo con todo el pequeño reino del viejo.

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Hermano, soy Carlotta te envió esta Paloma mensajera para que sepas que estoy bien, el viejo murió mientras teníamos relaciones, ahora soy al dueña y señora este pueblo, cuando quieras visitarme solo ven.

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Hermana, recibí tu mensaje, me alegro por tu triunfo pero me temo que no podré ir a visitarte, no por ahora, nuestro padre murió, parece que a neutro padre también se le paró el corazón, ahora me toca ser el jefe militar del sur pero algún día iré a verte , te lo prometo.

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¿Mi padre murió ? Cuando recibí tu mensaje llore amargadamente su muerte, aún espero tu llegada, te quiero.

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Pronto, pronto... Yo te amo.

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Giovanni llegó al pequeño puerto después de la batalla Arendelle, pero se separaron despidiéndose de una manera que ambos juraron volverse a ver antes de morir.