Marissonshipping Week (Serie de One-shots)

Un abrazo no hace daño a nadie... tal vez.

Tercer día~

 Se supone que este día corresponde a los abrazos, ¿no? Si, son sobre abrazos~~

La verdad es que me gusto escribir esta cosa, y ya, ya volví a mi humor shido y a mis formas de humillar a Alain <3 aun que mañana también me voy a poner sad, preparensen (no me sale ser sad bblb)

Ya saben, notas abajo y toda la cosa esa :v

Exijo mis empanadas de queso -mi mami ta haciendo mientras escribo esta wea-

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No es que fuera muy apegado a la gente...

Bueno, eso ya era una gran mentira. Era un completo encariñado con la gente que solía esforzarse por estar cerca de él, pero no sabía demostrar cariño como tal.

El caso se mostraba en la forma que solía tratar a Mairin desde un inicio. No la trato muy bien, y eso era algo que siempre reconocía, pero se metió en su viaje a la fuerza, ¿qué esperaban? Pero bueno, de alguna manera eso le supuso una ventaja, ya que al encariñarse con ella, le dio una motivación para volverse más fuerte. Aun que en el transcurso de su motivación surgió un evento que lo impulsó a motivarse más en momentos duros, y ahora no hacía mas que sacar a flote el lado puberto que trataba de ocultar.

El abrazo en Hoenn.

Cada vez que recordaba el dichoso abrazo no podía evitar sonrojarse. Si, que ella dio el todo jugando también su vida por salvar la de él, y eso lo agradecía... pero rayos, el haberse sentido tan cómodo después de una situación tan desastrosa le avergonzaba de cierta manera, ya que debía mostrarse siempre fuerte.

Pero al recordar el abrazo y lo que vio después de este hacían que toda esa fuerza fuera igual a la de un Metapod recién evolucionado.

Al separarse pudo ver a una Mairin con las mejillas rojas, con los ojos con lagrimas y con más brillo de lo común, tratando de mostrarse fuerte para no preocuparle, y además, mirándolo a los ojos, y apoyada a él por el reciente abrazo. No sabía los otros, pero el ver eso al frente suyo le revolucionaba las hormonas.

Para la mala suerte de él tuvo tres espectadores: Máximo y su Metagross, aun que de ellos no debía preocuparse mucho, ya que ahora estaban en lo suyo. De quien en verdad debía asustarse era del pokémon inicial de la joven entrenadora: Chespie, y su cara de picaría al momento de acordarse de la escena.

Si, para él si que fue un momento incomodo. No era muy lindo ver a un pokémon como los Chespie (en especial hembras) con una cara de "así se hace campeón" "tienes a la chica" o "para cuando la boda" "exijo llevar los anillos" (lo peor, no mentía con la cara que ponía ese Chespin). Lo peor es que todas esas caras las hacía cuando su entrenadora no esta cerca. Pequeña listilla.

Tenía algo de suerte que no le había contado a Charizard sobre el tema. Si no realmente la pasaría mal, pues su mejor amigo tenía la maña de molestarlo con aquella niña, todo gracias a que ganó la Liga Kalos por ello (aun que su idea solamente era participar para pelear contra Ash, pero nunca espero que su encuentro fuera en la final de la Liga, ya que ser el Campeón de Kalos no es algo de lo que se sienta orgulloso).

Aun que esa tranquilidad se le fue al carajo cuando vio una escena un tanto extraña.

Era Charizard cargando a Mairin por el "brazo" y Chespie al lado de él, con la cara de picaría de antes, y una Mairin tapándose la cara lo mas que podía con los brazos.

- ¿qué esta pasando aquí? - se acercó mas que nada para preguntar. Este tipo de situaciones era un tanto normal desde que empezó a convivir mas con la chica, pero el que ella se estuviera tapando la cara como si su vida dependiera de ello ya era extraño - ¿por que te estás tapando la cara?