Tras Un Pañuelo

El Trato

En el interior de un sucio callejón a las afueras de LA, dos hombres hacían un trato. Cobijados por la oscuridad de esa noche sin luna.
Uno era alto, pero fornido, su nombre era Samuel de Luque, un millonario muy conocido. Una bien recortada barba enmarcada su varonil rostro. Traía un abrigo morado y unos jeans negros rotos. Tiritando a pesar de la alta temperatura de lugar, más por nerviosismo que por el clima.
Y tenía razón en estarlo, teniendo como compañía a uno de los sicarios más afamados y buscados del país.
Este sonreía bajo la mascada color celeste que ocultaba la mitad de su rostro, solo dejando ver un par de ojos azabaches que miraban a Samuel con superioridad y un toque de maldad. Era conocido como sTaxX, era alto, pero no tanto como el hombre a su lado. Su mascada era lo único de color que llevaba encima, el resto de la apretada vestimenta era de un opaca color verde.

-Cuanto pides?- carraspeo el más alto.
-10,500... O lo prefiere vivo?- dijo el hombre con la mascada celeste.
-Si, no quiero que lo lastimes-
-En ese caso.. Serían 20,500-

El primero se removió un poco en su sitio, abriendo y cerrando los puños, no se sentía bien en ese obscuro callejón. Y la compañía de este hombre que lo miraba como si de escoria se tratara, no ayudaba mucho.

-Acepto- dijo al final con un hilo de voz- Pero deberá entregarlo el sábado, tiene una semana-
-Puedo hacerlo en menos tiempo-
-Una semana es más que suficiente para conseguir un buen lugar donde esconderlo hasta que recapacite- dijo fijando sus ojos en un punto del suelo, quizás en la lata de cerveza a sus pies.
sTaxX camina hacia el final del callejón pero antes de pasar la esquina regresa sus ojos negros a el tembloroso Samuel.
-Recogeré los 20,500 el viernes en la tarde justo aquí- señala el suelo- más le vale traerlo todo- amenazó y desapareció en la oscuridad que esa noche ofrecía.

Solo, ahora, Samuel decidió llamar a su amado una última vez.
-hola?-
-¿cuando contestarás mis llamadas con un "hola amor"? -
Un pesado suspiro se oye al otro lado-¿Que quieres Samuel?-
-Hacerte mio- sonríe lujurioso recuperando toda la seguridad que hace momentos no tenía.
-Voy a colgar... -
-Willy, amor, se que me deseas tanto como yo a ti. Así que sólo te lo o diré una última vez... -
-¡¡Vete al diablo, Samuel!!-
El pitido que indica que la llamada terminó, ahora llenaba los oídos de Samuel quien sonreía porque sabía que su amor no tendría otra opción más que atenerse a las consecuencias de no haberle correspondido cuando pudo.
Sonreía imaginando a su willy atado a su cama completamente a sí merced, sin poder oponerse o huir.
Solo debía esperar una semana, y seria suyo. La impaciencia lo abruma y decide regresar a por su auto a unas calles, volver a su casa y dormir tranquilo por una vez en siete años.

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-Te aprovechas de tus clientes, sTaxX- regaña el joven Alex, muy bajo en estatura a pesar de tener una edad que se acerca a la de su compañero. Tenía una camisa arañada y sucia al igual que sus pantalones que debían ser rojos pero la mugre que los impregna hacía que parezcan marrones. El joven estaba consciente de ello pero no deseaba apartarse de su compañero para darse una ducha.
Están en una especie de refugio en un sótano de la casa del menor que mordisqueaba un trozo de plástico con nerviosismo.

-Mm no te quejes, niño, con los 20,500 que me darán por este trabajo, conseguiremos suficiente para esas "vacaciones" que tanto deseas- dice el hombre de la mascada celeste.
limpiaba un cuchillo que estaba cubierta por un líquido espeso qué asemejaba ser sangre seca. Al parecer no era nada fácil de quitar puesto que sTaxX fregada con fuerza una y otra vez.

El joven se ruboriza intensamente, baja la cabeza hacia su regazo lanzando el trozo de plástico a la hoguera -...y... ¿a quien mataras ahora?- pregunta.

-No lo matare, Alex, solo lo raptare-

-bueno... ¿a quien raptaras?-

-A un idiota que no quiso nada con otro idiota loco por los negocios- dice quitándose la mascada dejándose ver. El menor se estremece al contemplar el rostro de su hombre.

-¿... a que te refieres con eso de "loco por los neg..."?-

-Un engreído millonario, Alex- arroja su mascada a la cabeza del menor -Me dio una semana para ir a por el,capturarlo, llevárselo y ayudar a esconderlo-

se quita la mascada de la cabeza y sonríe -pero tu no necesitas tanto tiempo-

-Lo se, pero ese gilipollas debe buscar un buen lugar donde pirarse- dice con un tono de repugnancia- así que- se levanta de su sillón roído y polvoriento dejando el arma a medio limpiar - saldrás mañana a por el cloroformo y... quizás mas balas, yo descansaré lo suficiente para no dormirme en las horas de trabajo-

-P-pero.. sTaxX.. Mañana saldríamos juntos.. Recuerdas?-tartamudea el menor poniéndose de pie frente a su compañero. -hace mucho que no salimos juntos.. C-como pareja... -

STaxX lo mira sin expresiones, analizando las temblorosas palabras de su "pareja", prefería mucho más decirle "pasatiempo".
-s-sTaxX?-
-Iras por el cloroformo y ésto se acabó- dijo serio haciendo la típica salida que tanto le encanta hacer. Camina hacia la puerta del sótano, se detiene en el umbral, mira por encima de su hombro y dice: no me hagas tener que castigarse de nuevo "amor".

El menor baja la cabeza. Debía esperar, cuando tuvieran suficiente dinero para las vacaciones, todo cambiaría. Una pequeña parte de él sabía que no, pero la otra parte, más grande, tenía la esperanza de que todo cambiaría.

Con un largo suspiro se sienta en el sillón en el que antes había estado su compañero. Toma con repugnancia el cuchillo y comienza a frotar la mancha con un trapo mojado.
Sus facciones se tuercen en una pequeña sonrisa de esperanza - todo cambiará- murmura para si mismo frotando más rápido motivado por este nuevo sentimiento.