Cosas que hicieron que me fijara en ti

Que aceptes todo lo que soy

Y como sí, claro el destino –maldito pienso que la tienes contra mí existencia- me encontraba en el lugar equivocado al momento equivocado, el enano hablaba contigo.

Claro el tema en discusión no era otro más que “¿Cómo eres capaz de soportar su manera tan indiferente de ser? ¿Es un engreído sin remedio?”

Claro, por supuesto de esa manera crecí y aunque tratara de menguar todo eso en mí, era difícil, pero, como rayo de esperanza, tu armoniosa voz comenzó a escucharse.

—Claro lo es, es insoportable, bullicioso, molesto, juega con todos, mujeriego, coqueto, muy creído y altanero, desespera a cualquiera, no se toma la cosas con seriedad, pero, todo eso, todos esos detalles lo hacen ser Ren, alguien quien finge ser desinteresando, alguien que calla y observa, presta atención en detalles, no se le pasa nada por alto, puede ser en ocasiones infantil pero solo lo hace para llamar la atención, es celoso e inseguro pero al final, al final, es un buen chico — callabas mientras sostenías en tu rostro esa sonrisa hermosa, llena de orgullo —No fue fácil aceptarlo, sin embargo le amo tal cual es…— y como si lo que los retuviera en ese sitio los liberaban, se retiraban con un enano riendo y comprendiendo que realmente estás enamorado de ese sujeto llamado Ren.

Mis piernas no pudieron seguir manteniéndome, me dejaba caer suavemente apoyado en la pared hasta el suelo, miraba al techo unas lágrimas se comenzaban a formar en mis ojos, tal dicha, tal felicidad ¿acaso era posible?

Que aceptes lo que soy, lo bueno, lo malo, más malo que bueno, que lo aceptes todo, hace que te amé mucho más, que aceptes lo que soy hace que me fije mucho más en ti.