The Game.(Terminada)

Capitulo 34.

Para futuro incierto, respuesta no hay...

Capitulo 34:

Estaba en mi habitación, no sabía qué hacer, qué pensar, Zayn no me reconocía, para él en estos momentos no existo, tal vez hizo lo que le pedí, olvidarse de lo nuestro. Aunque fue lo que le pedí, eso no era lo que yo quería. ¿Debería dejar que siguiera así o le recordaría lo que éramos? Decidí dormir, tal vez eso era lo mejor por hoy.

Al día siguiente, fui a la escuela esperando ver a Zayn, pero como lo supuse, no estaba, al día siguiente tampoco. Ya era domingo y no recibía noticias del mundo, estaba desesperada, necesitaba hablar con alguien. 

— ¿Hola? —Respondieron al otro lado de la línea.

—Christofer... voy a morir. —Se escuchó una risita.

—Ya se lo que sucede, pero mejor dímelo tú.

—Él no me recuerda.

— ¿Eso no es lo que siempre quisiste?, incluso tu se lo pediste, ¿no estas satisfecha?

—Mentí, ¿si? Todo lo que le dije era mentira, ahora... lo necesito.

—Creo que te diste cuenta demasiado tarde.

—No voy a aceptar eso por respuesta.

— ¿Por qué no le ayudas a recordar?

—Eso es lo que haré. Chris...

— ¿Si?

—Gracias por escuchar mis ridiculeces. 

— ¿Ya te había dicho que me encanta tu vida?

—Entonces te la regalo, porque a mi no me gusta.

—Tu vida es el mejor drama, te lo aseguro. —Rió.

—Nos vemos mañana, adiós, te quiero.

—Y yo a ti. Nos vemos.

Al día siguiente...

El fuerte ruido de mi alarma me decía que ya era hora de levantarme, aunque no quería volver a pisar la secundaria, debía hacerlo, sonaba "What Doesn't Kill You" me levanté, me vestí,  alboroté mi cabello y baje a desayunar. 

—Buenos días. —Dije, sin un muy buen ánimo.

—Buenos días. ¿Me creerías si te digo que hoy te ves más radiante? —Dijo mi madre, con un dulce tono de voz.

—No, no te creo. —Me senté en la mesa.

— ¿Te sientes bien? —Pregunto papá.

—Ehm, no se que decirte, mi novio no me recuerda, en su presente no existo, creo que la pregunta se responde sola. —Mire hacía mi plato.

—Cariño, Zayn no era tu novio. —Ya lo sabía, pero no quería que me lo recordaran, sea como sea, yo le haré recordar.

—Lo sé, pero pronto las cosas cambiarán. —Dije muy decidida y con una sonrisa en mi rostro.

—Eso esperamos. —Terminé mi desayuno, cepillé mis dientes y salí de casa, subí mi auto y llegué a la escuela. El primer bloque de clases pasaba lento, pero al fin le dio paso al almuerzo, estaba en la mesa con todos los chicos, Christofer ya se sentaba con nosotros, me costó convencerlo, pero lo logré. Levanté mi mirada y vi que Zayn se aproximaba a nuestra mesa, una sonrisa se dibujó en mi rostro.

—Hola chicos. —Dijo Zayn. Recordaba a todo el mundo excepto a mí.

—Hola Zayn, ¿qué hay? —Preguntó Liam sonriente.