24 de octubre

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—Tranquila, no pasa nada...— dijo Sam  a Julia, ambas se encontraban en las bancas del patio trasero de la escuela.

—Es que no lo entiendo ¿Es tan malo ser lesbiana?— Decía entre sollozos Julia, la cual hasta el momento parecía estar neutra había estallado.

—Ser lesbiana no está mal, no dejes que te metan eso en la cabeza— replicó molesta su amiga.

—Es que ¿Por qué las cosas son así de difíciles para mi?— preguntó con la cabeza apoyada en el hombro de Sam.

—No te lo tomes a pecho, bien sabes que no se puede enamorar a una persona tan rápido y menos si esta no coincide con tu preferencia sexual— contestó Sam mientras la abrazaba.

—No me refería a eso...— dijo limpiándose las lágrimas.

—¿Entonces?— preguntó confundida.

—Es que... Todo está jodido, prácticamente me quedé huérfana porque sé que mis padres jamás me dirigirán la palabra, hace un año cuando mis familiares se enteraron de que era homosexual me volví invisible, me quitaron el derecho al estudio, no tengo ni una oportunidad con la chica que me gusta, me restriegan en la cara el hecho de que soy lesbiana y que no importa cuando me esfuerce por ser una persona normal, siempre tendré eso como "defecto", sinceramente me estoy hartando— soltó con un suspiro al final.

—Tranquila, ten en cuenta que nadie es "normal" o sigue el estereotipo de "perfecto", mis hermanos se empeñaron en hacerlo y Luis terminó internado en el hospital por dos semanas después de una crisis en la universidad, además de que le robaron el carácter, ahora está volviendo a ser igual de carismático como antes por suerte, y Mariana todavía padece de anemia, además de que porque no la vieran mal escondió su sexualidad y con la chica que se iba a casar, fué horrible, y eso, es lo que yo se, es demasiado estrés, pero les fue impuesto de pequeños, por suerte mis padres no me lo impusieron a mi, tampoco a ellos, pero los demás se encargaron de hacerlo, sus maestros amigos y todo su entorno cercano—

—De hecho creo que se pasan de perfeccionistas — contestó Julia con una mueca— ¿Puedo hacerte una pregunta?—

—Dime—

—¿Por qué les dices padres y hermanos?—

—Es que desde que era una pequeña crecí con ellos, me acostumbre a decirles así porque para mi ellos eran mis padres, fue cuando entre a la primaria que me di cuenta de que mis apellidos no coincidían ni con los suyos ni con los de mis hermanos, así que pregunte y me contaron— contestó con una sonrisa acordándose de su infancia.

—Oh, ya veo, es muy lindo eso, te criaron como a su hija, pero ¿Por qué te quieres mudar?— seguía dudosa Julia.

—Solo quiero experimentar vivir sola, además mis padres están demasiado viejos para cuidarme, ellos ya tuvieron a sus hijos, quiero que descansen, aunque los veré todos los días—  dijo con una sonrisa Sam.

—Ahora entiendo, perdón si te molesté con mis preguntas— dijo dándose cuenta del peso que estas tenían.

—No te preocupes, no me molesta hablar de mis orígenes, pero aquí el tema no soy yo, eres tu, no tienes que preocuparte por una orientación sexual, eres normal tan y como eres—

—Ojalá todos pensaran como tú — contestó con un suspiro quebrado.

—Lo se, soy increíble — dijo bromeando causando una risa de Lía — ¡Así es como te quiero ver!— comentó sonriendo Sam.

—Trataré de estar así siempre — dijo abrazando con cariño a su mejor amiga.

—Lo estarás y si no es así yo haré que lo estés, por ahora te deseo suerte con Liz— afirmó correspondiendo el abrazo de su amiga.

Sam, Mariana y Luis son reales, su historia es la misma, los puse porque quiero decirles una cosa:
Nunca se dejen llevar por la presión de los demás, en el caso de Luis y Mariana ellos dos eran catalogados como los hermanos perfectos por lo que se lo apropiaron y no se permitieron errores, Luis era tan carismático, pero "maduró" siendo lo que los demás esperaban y se convirtió en una persona súper seria, estresada y explosiva, aunque claro, solo explotaba a solas, ahora está mejor, Mariana falló una calificación y sintió como si se cargara el mundo, lo tradujo a perfeccionar otras cosas, además claro de que ser lesbiana era "error" y terminó con la persona que quería además de que se justificaba el no tener novio por concentrarse en "lo importante" podía ver la culpa en sus ojos por ser lesbiana (la sigo viendo), por favor, por muy "bueno" que sea el puesto no se lo atribuyan ignorenlos y sean ustedes mismos.
Gracias por leer, tenía hecho este cap hace mucho pero no se porqué no lo subí antes.

¡No soy lesbiana deja de insistir!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora