Maraton (4/4)
—Hola ___, ¿cómo estas? —me saluda la doctora Brooks.
—Un poco mejor, gracias.
Tomo asiento en el diván y la doctora se sienta frente a mí con su tableta electrónica en la mano lista a escucharme.
—Y bien, cuéntame ¿cómo te haz sentido estos días?
—Pues la verdad es que estos días he estado como rara, he tenido una batalla de estados de ánimo.
—¿A qué te refieres exactamente?
—Bueno, el viernes estuve todo el día en la depresión e hice lo que me pidió, junté todo lo que tengo de Liam y bueno, me deshice de algunas fotografías, lo demás… no pude —agacho la mirada y entrelazo mis dedos al mismo tiempo que siento como el hoyo de mi pecho comienza a arder como siempre que pienso en él.
—Bueno, pero ya es un avance, es poco a poco.
—Lo se, y bueno el sábado me puse a hacer limpieza y resultó muy bien pues me ayudó a no pensar, a no deprimirme, incluso puse música, hace tiempo no escuchaba nada de música y fue agradable, incluso canté —reí por lo bajo, mire a la doctora y note como una leve sonrisa se dibujaba en sus labios —luego llego mi amiga Consuelo y me pidió la acompañe a una fiesta, yo al principio no quería pero terminó convenciéndome.
—¿Y cómo te fue en la fiesta? ¿Cómo te sentiste?
—Pues la verdad es que la pase bastante bien, creo que llegué a pensar que me daría parálisis facial de tanto reírme. ¿Sabe? Ese día incluso me sentí libre, con un peso menos de encima, mis amigos estuvieron ahí apoyándome, creo que toda la noche me miraban raro pero felices, no podían creer que yo estuviera así tan, relajada, tan como antes.
—De verdad me alegro mucho ___, me parece que con esto te haz dado cuenta de qué tan importante es socializar, el salir con tus amigos, salir de la rutina.
—Si, es verdad, y bueno me gustaría repetirlo pero no se, no tan pronto. Es como que, siento que aun debo luchar contra mi misma, debo sufrir mi duelo, aun tengo mucho que llorar. Pero sobre todo quiero dejar de hacerme preguntas de las cuales yo se que no voy a obtener respuesta.
—¿Qué preguntas?
—Quiero saber, porque se fue, porque me decía que me amaba si un día solo se iba a ir sin decirme nada.
—¿Y por qué quieres saber eso? Es decir, ¿en qué cambiaría la situación?
—Bueno de cambiarla, no cambiaría —volví a agachar la mirada entristecida.
La doctora tiene razón, ¿de que me serviría saberlo? ¿Acaso con eso, él regresaría a mi lado? Obviamente no, es estúpido, hasta ahora soy consiente de ello, pero algo dentro de mí me exige saber la verdad.
—¿Entonces?
—No lo se, eso es lo peor. Yo exijo saber, siento una impotencia enorme porque, e llegado a pensar que eso es lo que no me deja superarlo. No me puedo hacer una idea fija, es decir, sé que se fue, sé que el no va a volver pero, quizá si yo supiera la verdadera razón yo tendría una base, no sé es… extraño —suspiro con pesadez, tal y como me siento en este preciso momento—. Siento que mi vida es ahora un rompecabezas, y me faltan piezas, y me enoja, me pone de malas que el no haya tenido el valor de decirme las cosas de frente, creo que no me lo merecía, al menos yo creo que nunca le fallé, todo lo contrario, lo amé más de lo que jamás llegué a pensar que amaría a nadie y él me pagó de esa manera tan cobarde, es horrible porque me hace sentir como si no hubiese sido suficiente con abandonarme, todavía él me deja con esta duda, con la incertidumbre, y me hace pensar que tal vez si hice algo mal pero ¿qué cosa hice mal? Y finalmente, me siento peor que al principio, es como si todo lo hubiera hecho con el propósito de que yo estuviera así, por él el resto de mi vida.
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The Last Kiss | l.p
Fanfiction¿Cómo reponerte de un abandono?¿Que harías si la persona que amas se va de tu vida sin dejar rastro? ¿qué pasa cuando tu vida comienza a tener un rumbo y esa persona aparece de nuevo en tu vida?