7

219 49 0
                                    

El cuarto de Yoongi quedaba cruzando la sala, Jimin vio nada más algunos muebles blancos y un piano de cola del mismo color. Siguió a Yoongi por un corto pasillo hasta una puerta de madera abierta de par en par.

La habitación de Yoongi era lo que se suponía debía ser una especie de invernadero, pero estaba adecuado para que el chico viviera allí, seguramente desde pequeño para que no tuviera que subir escaleras.

Las paredes eran color crema, y tanto su escritorio como las mesas y su cama eran negros, el resto de las cosas eran de diferentes colores, dándole un aspecto divertido al cuarto. Jimin vio un equipo de sonido en una de las esquinas y en la parte superior del escritorio un tocadiscos.

Habían vinilos y CDs apilados al lado de la cama, en las estanterías, al lado del equipo y al lado de la mesa de noche.

—Estás muy callado. -dijo Yoongi. Se había movido las gafas y estas descansaban encima de su cabeza, empujando su cabello hacia atrás.

—Sólo estoy analizando tu cuarto. -respondió Jimin. —Te gusta la música.

—Si. -Yoongi sonrió. —Es lo que me mantiene cuerdo.

—¿Cuál es tu género favorito? -preguntó Jimin.

—No tengo uno. -contestó el rubio. —A veces me gusta escuchar música clásica, aunque me gustan otras cosas, como el rap. No me gusta el rock demasiado pesado o el metal, algunas canciones de electrónica tampoco.

—¿Por qué? -preguntó Jimin, finalmente sentándose al lado de Yoongi, la cama se hundió ante su peso.

—Son inquietantes, y las letras también lo son. -Yoongi se encogió de hombros. —Y la electrónica es tan repetitiva todo el tiempo, supongo que para ustedes sería como estar de viaje y caminar y caminar pero seguir viendo lo mismo.

Jimin sonrió. —Supongo.

Encima de la cama había un libro abierto y Jimin lo ojeó, las páginas estaban en Braille y Jimin examinó la escritura, imaginando el esfuerzo que tenían que hacer para crearlos.

-¿-Qué tan costoso es comprar un libro de Braille? -le preguntó.

—Mucho. -Yoongi respondió. —Es trabajo duro hacerlos, así que es trabajo duro adquirirlos. Hay muy pocos lugares en la ciudad, aunque como ya llevo tiempo de ser cliente, es más fácil para mi.

—¿Cómo aprendiste a leer? -Jimin no sabía si estaba siendo imprudente, pero a Yoongi no parecía importarle, así que estaba bien.

—Cuando era pequeño tenía una maestra que venía aquí a casa y me enseñaba, me gradué así, incluso ella fue la que me inteodujo a mí a enseñar.

Jimin estaba a punto de responder cuando la puerta se abrió abruptamente.

—¿Se puede saber qué hacen aquí con la puerta cerrada? -era la mamá de Yoongi, quien le guiñó un ojo a Jimin demostrándole que no estaba enojada en realidad.

Las mejillas de Yoongi enrojecieron. —Mamá...

—Mamá nada, Yoongi. Mientras vivas bajo mi techo no hay chicos en tu habitación con la puerta cerrada. -dijo ella.

—Lo siento, mamá. -dijo Yoongi finalmente.

—¿Traes muchos chicos a menudo? -preguntó Jimin asegurándose de que sólo Yoongi lo escuchara.

—Ambos, a comer, ahora. -ordenó la mamá de Yoongi, riéndose un poco de su hijo.

—No. -Yoongi le respondió a Jimin. —Sólo tú.

Inked ♡Yoonmin♡ (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora