Mi primera experiencia en la preparatoria fue cuando conocí a Jhosua.
Era un chico alto y de piel morena, con una hermosa sonrisa, parecía exactamente el tipo de chico que no me habría hablado amenos que quisiera algo.
Para mí sorpresa me preguntó mi nombre y hablamos un poco antes de clases.-Hola,me gusta tu cabello- me dijo.
-Hola, gracias...-
-Me llamo Jhosua, mucho gusto.
-Yo soy Aileen. -intente sonreír.
-Sí, lo escuché ayer.- sonrío, era lindo.La primera clase fue de español, me mantuve ocupada haciendo mis apuntes y a Jhosua no pareció molestarle que dejará la charla para después, 15 minutos antes de finalizar la clase me pasó un papelito doblado en dos:
¿Vamos por un cigarrillo saliendo?
Yo lo mire y asentí, me emocionaba la idea de hacer un amigo, terminaba ya la clase, estaba algo nerviosa, pero no debía demostrarlo.
Sonó la campana.
-¿Nos vamos?- Preguntó Jhosua con una sonrisa y yo asentí.
Salimos de la escuela a una especie de estacionamiento, por el poco tiempo que llevamos ahí, supongo que ambos estábamos perdidos y necesitamos estar con alguien. Nos sentamos cerca de un árbol y me pasó la cajetilla.
-¿lo enciendo?- dijo.
- por favor.
Comenzamos a charlar, resulta que el también venía de otra ciudad, por lo cual tampoco conocía a nadie. Le hable un poco de mi y él me contó mucho sobre él. Con el paso del tiempo comenzamos a llevarnos mejor, incluso estudiábamos juntos.
Realmente podría decir que el fue un buen amigo, al menos un tiempo.Y desde ese momento todo comienza a ponerse difícil para mí.
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El peso de las palabras.
Подростковая литература¿Qué harías si tu vida se va al carajo? Sí tuvieras una única oportunidad de cambiar las cosas, de dejar tu pasado y todo lo que te lastimo. ¿Lo harías?