LA PIADOSA
Antonia Crane lo tiene todo para ser feliz: es bella, rica y por si fuera poco su destino está debida y seguramente trazado: cuando cumpla los dieciocho años luego de ser presentada en sociedad, se convertirá en la flamante condesa de Ra...
"Los secretos más importantes, son los más tentadores de desvelar."
Tonya se sentía extraña y confundida. Su impecable debut en las fiestas de la temporada, fue ampliamente comentado y alabado. Hasta Lady Gossip, una declarada admiradora de la pelirroja, dedicó un extenso párrafo en su columna semanal describiendo detalladamente el exquisito atuendo que lució, el evidente favoritismo que todas y cada una de las patronas de Almack's tenían por la heredera, la rapidez con que los nombres de los más rico y guapos herederos de la gente bien tenían por entablar conversación con ella, y sobretodo el interés de su "nuevo admirador", Lord Richard Blaze- Harper, heredero del condado de Rexton y poseedor de una fortuna tanto o más cuantiosa que su notable atractivo físico. Pero lo que la cotilla no sabía, era que los condes de Rexton, abuelos maternos de Lord Richard, tenían intereses comerciales comunes con los difuntos progenitores de la pelirroja en el negocio de tejidos, y al ser Rich su heredero había coincidido en distintas ocasiones con Tonya en su casa de Leicestershire. Además, el joven no tenía en ella más interés que el de un hermano mayor. Richard estaba obsesionado con la misteriosa mujer que hacía exactamente un año, le dedicó un par de sonetos de Shakespeare, misma que buscaba incesantemente. "Bueno, esa es otra historia."- sonrió para sí " Y de seguro Lady Patrañas ni idea tiene de ello."
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( *Lord Richard Blaze- Harper, en multimedia)
Mientras Sue recogía su cabello en un sencillo recogido, Antonia se ponía al día de los cotilleos que ya habían llegado a las dependencias de la servidumbre:
- ... Becky, la ayudante de cocina dice que el lacayo de Lord Palmer escuchó decir a la doncella de Lady...- continuaba la criada, con tal inspiración que provocaba felicidad y un poco de risa a la bella pelirroja. - Señorita, veo que sonríe. Según la chismosa esa, lo paso bien,- sonrió socarrona.
- De cierto así fue, Susan. Rich sabe como sacarme una sonrisa, aún cuando por dentro sienta que estoy de duelo.
¡ Cuán cierto está aquello! Ahora comprendía, porque su éxito social le confería una alegría parcial. Ver al vizconde la noche anterior, tan guapo y resuelto como siempre, derribó toda resolución de ignorarle. Felizmente cuando Saatfield se acercó a saludarle, su carnet ya estaba lleno, lo que no hizo mucha gracia al apuesto moreno, y mucho menos cuando supo que dos de los vals estaban reservado al célebre y apuesto hermano medio de Rawlings y Leto. " Dios mío.- imploraba en su interior, mientras alisaba una arruga imaginaria en su bello vestido de mañana.- Apiádate de mí. No es mi intención renegar de tus designios, pero he sufrido la pérdida de todos los seres a los que amo. ¿ Por qué razón ahora me veo privada de estar con la persona que cautivó mi corazón? Y ¿ Por qué si estoy decidida a cumplirlos me es imposible olvidarle?"
- Listo, señorita.- la interrumpió la voz complacida de su doncella.- Sencilla y deslumbrante. Ahora baje a desayunar, Lady Moira debe estar por bajar. Me encontré con su doncella mientras subía a prepararla.
