Capítulo 8- Un mal sueño...

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Me quede helada, era Jack... no lo podia creer...

- ¡TONTO!- dije para despues darle un golpe en la nuca.

- ¿Que te pasa? ¿no te alegras de verme?- pregunto rascandose la nuca.

- Pues claro pero ¿por que desapareciste? ¿donde estabas? ¿que paso? tu madre entro en depresion... yo llore y no sali de casa durante meses...- dije abrazandolo.

- No puedo decirte nada por el momento mi reina... pero te lo contare cuando estemos fuera de este sitio.- dijo el correspondiendo mi abrazo.

- ¿Donde estamos?- pregunte.

- En el infierno, aqui todas las almas que han cometido algun pecado estan aqui...- dijo.

- A mi me han condenado a muerte...- dije triste.

El se separo de mi y me miro a los ojos... esos ojos me hacian sentir segura, que nada me podria pasar mientras el estuviese hay, conmigo.

- Te he hechado de menos Jack...- dije acercandome a el.

- Y yo mi reina...- dijo el uniendo nuestros labios.

Sigo enamorada de Jack... pero hay algo que me hace pensar en Marshall... ese estupido, maldito hijo de perra... 

Es mejor que pase pagina y siga mi vida junto a Jack... el me quiere y yo a el tambien... mientras que con Marshall todo es diferente, el no me quiere, solo a jugado con mis sentimientos.

Jack se separo de mi y unio nuestras frentes.

- Tu no moriras hoy... te sacare de aqui.- dijo para volver a besarme.

Se separo de mi y se dirigio a los barrotes.

- Guardias... ya he acabado de hablar con la humana, quiero salir de aqui.- dijo.

Uno de los guardias se acerco a los barrotes y extendio su mano, estos desaparecieron y Jack pudo irse, pero sin antes dirigirme una mirada llena de deseo y amor.

El guardia volvio a hacer que los barrotes aparecieran y se fue a sentar.

- Oye... ¿aqui no hay cama?- pregunte con miedo.

- Si, pero no es hora todavia... ¿tienes sueño?- pregunto.

- Si...- dije.

El dio un suspiro y chasqueo sus dedos, haciendo que apareciera una cama de color rojo.

- Gracias...- dije para despues acostarme y dormir.

En el sueño...

Iba caminando por un bosque oscuro, hasta que escucho una voz a mis espaldas...

- Maldita zorra... dijiste que me amabas...- dijo aquel ser.

Yo me di la vuelta y vi que el que me hablaba era Marshall.

- ¿Zorra yo? zorra tu novia.- dije.

- Ursula no es ninguna zorra.- dijo firmemente.

- Pues lo es a mi parecer.- dije yo cruzandome de brazos.

- Aqui la unica zorra eres tu y mereces morir...- dijo haciendo una bola de fuego en su mano.

Yo extendi mis brazos, asi formando una cruz.

- Venga, atrevete.- dije cerrando mis ojos.

Yo espere al impacto, pero nunca llego.

- ¿Ves? los dos sabemos que no puedes, ya que tu estas enamorado de mi... tus sentimientos no te dejan hacerlo...- dije abriendo mis ojos.

Cuando abro mis ojos me encuentro con Marshall a centimetros de mi.

- Puede que sea cierto... pero yo se que tu tambien sientes algo hacia mi...- dijo el mirandome a los ojos.- y si no es asi mirame a los ojos y dime que es mentira.

Es cierto... sentia algo por el, pero me hizo daño...

- Es verdad, siento algo por ti... pero todo eso se a ido a la mierda cuando aparecio esa zorra que tu llamas novia, todo se fue a la mierda cuando apareci aqui, en el mismo infierno, condenada a muerte por amarte... y encima para tambien oir esas duras palabras salir de tu boca... esas palabras que han destrozado mi corazon- dije mientras se me escapaban algunas lagrimas.

El me miro sorprendido y a la vez dolido.

- El no te combiene... por alguna razon esta aqui.- dijo.

- Yo decido quien es el que me combiene y tu no.- dije.

- Iris yo...- lo interrumpi.

- Pero yo voy a escapar de aqui junto a mi amado Jack, que tambien siento algo por el... y el por mi.- dije para despues alejarme de Marshall.- Adios Marshall, nos vemos cuando muera.

Despues de esas palabras desperte en mi cama, mirando al techo, con las mejillas mojadas y el corazon roto.

Me enamore de mi asesinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora