Capítulo 5-Encantada

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Los días pasaban y Alison se entretenía viendo aquel aburrido canal. Llevaba ya un mes y medio en Helghan y la verdad es que empezaba a echar de menos muchas cosas de Vekta y sobretodo a su madre y su amiga Hil.

Deark llegó a la misma hora de siempre.

-Te traigo la comida.-dijo el joven nada más llegar.

-Gracias. ¿Y tú?-

-Ya he comido.-dijo el secamente.

La joven sacó la comida de la bolsa y comenzó a comer. Deark se marchó a la habitación a cabiarse como siempre. Después salió con una pantalla táctil  y se sentó frente a ella en silencio.

-¿Qué haces?-preguntó la joven.

-Juego.-

-¿A qué?-

La chica se levantó, cogió el plato y se puso detrás de él para ver lo que estaba haciendo.

-Jugaba con mi padre cuando era pequeño.-

-¿Cuándo era un padre?.-preguntó Alison sin esperar respuesta.

Alison observó la pantalla. Había un montón de recuadros vacíos y en algunos había números. Deark tocaba algunos recuadros vacíos para que le saliera una lista con los números del 1 al 9, después elegía un número y lo introducía en el recuadro. Alison intentó comprender la lógica que seguía aquello pero le pareció imposible.

-¿Cómo se juega?-preguntó la joven.

-Tienes que rellenar los espacios en blanco con números de 1 al 9, pero teniendo en cuenta que ni en las líneas verticales, ni en  las horizontales puede haber un número repetido.-

Alison arqueó una ceja intentando comprender aquel juego.

-Es muy sencillo. ¿Ves que en esta línea tenemos el cinco y el siete?-Alison asintió.-Pues eso significa que en los recuadros de esta línea no podremos poner ni el cinco ni el siete.-

-¡Ya lo entiendo!-dijo la joven dejando el plato sobre la mesa.-Déjame hacer uno a mí porfi.-

Deark sonrió a pesar de que sabía que la joven no podía verlo y le tendió la pantalla a la joven.

-Aquí va un ocho.-

-No.-dijo Deark.

-¿Por qué?-preguntó extrañada la joven observando todos los recuadros.-¡Ah!-exclamó percatándose del fallo.-¡Aquí ya hay un ocho!-

Deark asintió.

-Esto me gusta.-dijo la joven poniendo otro número más.

-Mi padre y yo competíamos por saber quien lo hacía más rápido.-dijo Deark con un toque de nostalgia que Alison notó enseguida.

-¿Competimos?-le dijo ella sonriente.

Deark sonrió , a pesar de que la joven no podía verle. Y acto seguido se marchó sin mediar palabra hacia la habitación. Alison se quedó paralizada. ¿Había hecho algo malo? Antes de que pudiera preguntarle el joven volvió con otra pantalla táctil.

-¡Te voy a ganar!-le dijo el joven.

-No te lo crees ni tú.-dijo la joven fingiendo cara de enfado.

Deark tardó diez minutos en terminar,Alison ni siquiera había conseguido rellenar a la mitad. Continuaron durante más de una hora compitiendo por ver quien lo terminaba antes. Alison no consiguió ganar ninguna vez y eso la ponía histérica.

-¡No es justo! Tú has estado mucho tiempo haciéndolo.-dijo la chica cruzándose de brazos y frunciendo el ceño exageradamente.-Venga, la última.-insistió la chica.

Amor en GuerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora