Capítulo 33: Malentendidos...

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“Y todo comenzó a fallar...”


Así como en la vida hay momentos buenos, también hay momentos malos.

Y Yesung quería creer que sólo era parte del estrés del trabajo del menor.

Kyuhyun estaba demasiado ocupado con las entrevistas, las sesiones de fotos y demás que había dejado al pelinegro un poco de lado.

— Yesung-ah —llamó Jaejoong a cierto chico que miraba de mal humor al menú frente a él.

— ¿Qué? —soltó el pelinegro dejando de lado el menú.

— He estado preguntándote que vas a ordenar —dijo Jaejoong despeinando al menor.

— Lo siento, no te escuché hyung —Yesung sonrió avergonzado.

— ¿Qué es lo que te tiene tan distraído últimamente? —preguntó el mayor curioso. Y es que Yesung veía su celular cada dos minutos y siempre ponía cara de decepción.

— Nada —Yesung desvío la mirada.

— Eres malo mintiendo ¿sabes? —Jaejoong sonrió. — ¿Es por Kyuhyun-ah?

El pelinegro se sonrojo al sentirse descubierto. — Si, me preocupa.

Jaejoong alzó una cjea ante esas palabras. ¿Porqué Yesung estaba realmente preocupado? ¿Kyuhyun le había hecho algo?

— ¿Él te hizo algo?

— No, sólo que siempre está ocupado. —Yesung puso un puchero, y es que ya habían tenido oportunidad de salir gracias al trabajo.

— Es normal, Kyuhyun es el presidente de la empresa ahora y tiene que hacerse cargo de todo —Jaejoong estiró su mano y atrapó la del menor entre las suyas. — No pienses cosas de más, Yesung-ah.

— Lo sé, pero siempre buscaba tiempo para salir juntos pero ahora... —Yesung recordó que desde hace un mes, sólo veía a Kyuhyun para tomar el desayuno.

— Sólo lo ves en las mañanas ¿verdad? —soltó Jaejoong.
— No lo justifico pero tenemos demasiado trabajo, más porque tu hyung quiere que toda Corea se enteré de la nueva línea de ropa.

— Si, entiendo eso —Yesung soltó un suspiro. — Pero me aburro estando solo.

— Puedo ayudarte con eso —Jaejoong soltó las manos del menor para buscar algo en su cartera. — Aquí está, toma —agregó extendiéndole una tarjeta al pelinegro.

— ¿Qué es? —Yesung miro la tarjeta con curiosidad. — Park Hani... ¿quién es?

— Es una amiga mía, ella es escritora y necesita ayuda —el mayor vio que la mesera se acercaba con sus pedidos.

— Aquí están los dos capuchinos —dijo la chica haciendo una venia. — Si necesitan algo más pueden llamarme.

— Gracias —dijo el castaño.

— ¿Tu amiga es una escritora? —preguntó Yesung mirando todavía la tarjeta.

— Si, necesita alguien que le ayude a seleccionar y tomar algunas fotografías —musitó Jaejoong.

— ¡¿En serio?! —Yesung no pudo evitar sonreír al escuchar sobre ese tema.

— Es verdad, pensaba comprarte un cachorro pero tú también sales mucho —Jaejoong volvió a tomar la mano de Yesung. — Así que mejor le dije a mi amiga que tú le ayudarías.

— Gracias, Jae hyung —el pelinegro le dio un apretón al mayor.

— Me alegra verte así —Jaejoong sonrió.

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