Actualización: Jueves.
Chloè Burgeoise es una chica malvada y sin corazón, o al menos eso es lo que aparenta. Que es lo que trata de ocultar desesperadamente tras esa actitud?
Detrás de esa puerta de acceso estaba Nathaniel, quien no sabía por qué se escondía. Escuchó todo y se marchó sin siquiera ver a Chloè una vez más. El transcurso de los días eran cortos para los que disfrutaron la ausencia de Chloè. Esta apenas había sido dada de alta cuatro días después del suceso. Se encontraba en su habitación. Solo miraba silenciosa la mesa del cuarto llena de regalos, flores y demás. -Todos, Todos Mueranse. Papá, tu que nunca estás. Mamá, la que me abandono, Sabrina la traidora, Adrien, Marinette, Alya, Nino y sobretodo el maldito de Nathaniel!- se acurrucó en la cama. -pretendiendo que me conoce, pensando que somos iguales pero yo no puedo reír así de fácil.- Un dolor punzante la hizo torcerse del dolor. Procedió a descansar nuevamente. A la mañana siguiente volvió a la escuela, pero su rostro solo mostraba penumbra y su mirada desesperanza. Salió del auto y se dirigió al salón. Los susurros y rumores de los demás se oían lejanos y distorsionados como si una bestia le acechara. Se sentó en la banca del fondo, aquella lejana a la puerta. Los cercanos se recorrieron al frente. Sabrina también había llegado. Miró a Chloè y se sentó en el lugar abitual. Las clases transcurrían tranquilamente hasta que llegó el receso. Sabrina se intentó acercar sigilosa hasta que Chloè le advirtió. -No te acerques! Te dije claramente que no te quería cerca de mi.- Nathaniel quien recién entraba al salón se molestó por lo que escuchó. Temblorosas sus piernas caminaron hasta donde Chloè. Todos se callaron y solo observaban la escena. -Chloè, por favor ven. La maestra...- antes de terminar la frase Chloè le miró con rabia. -Aléjate también!!! Pretendiendo ser amable, vete al diablo!!- -Amm, Chloè.- Insistió. -la maestra...- -De nuevo con eso?! Déjenme en paz! Simplemente todos deberían morir!- Una vena en la frente de Nathaniel apareció. -Ya deja de joder!- grito un Nathaniel furioso. -Acompañame!- La tomo del antebrazo y la jaloneó contra su voluntad.. En el aula todos miraron la escena hasta que juleka rompió el silencio. -Esto fue de locos- camino hasta donde Sabrina y trato de calmarla -Nunca había visto a Nathaniel furioso.- -Es natural, Chloè es tan desesperante. Sobretodo el día de hoy.- aclaró Alya.
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