— Oh, Gracias a Dios – murmure.Habian chicos fuera de la escuela esperando a que el timbre sonara, por lo menos habia llegado a tiempo pero esto significaba las miradas hacia el pelirrosa y mi persona. El americano miraba sonriente hacia mi, mostrando sus hoyuelos y su perfecta sonrisa por lo que no pude evitar sonreir igualmente, era contagiosa.
— Que – pregunte atonita por su mirada, el nego mencionando un timido "nada", pero luego se digno a hablar al ver mi mirada de -dime que mierda sucede- haciendo que mis mejillas se tornaran rojas por su comentario.
— Tus labios estan un poco blancos
— Crei que no se notaria mucho – bufe al recordar que habia tenido poca delicadeza al aplicar el poco maquillaje que habia usado.
— O tal vez creiste que podria arreglarse facilmente – hizo cosquillas con uno de sus dedos sobre mi costado haciendo que diera un pequeño salto, rei por el momento pero tuve que parar cuando su rostro se acerco salvajemente al mio, asi es, salvajemente.
Este hombre tenia un aura que podria considerarse algo tierna, pero luego de unas horas podrias arrepentirte de llamarlo de esa forma. Josh es sinonimo de atrevido y galan, lo que me hacia recordar la noche anterior sin censura de por medio.
El timbre sono y me apresure a agarrar mi mochila de sus manos pero la movio agilmente hacia su espalda, intente agarrarla una vez mas pero fue en vano.
— Josh, voy tarde a cla...
— Farrah, que esperas – escuche a Kendra, mis ojos rodaron entorno a sus cuencas y me gire a verla. Sin embargo, ella no me miraba a mi, sino al chico que jugaba con mi mochila sobre su cabeza en estos momentos. Lo dije, lo digo y lo dire, esta chica ama ser el centro de atencion.
— Si, cariño – escuche a Josh, lo mire sobre mi hombro, ganandome un giño de su parte – Se te hara tarde – hizo un amago con sus hombros y sonrio, como solo el sabe hacerlo.
— Amm, nos vemos luego Dun – finalmente me dejo la mochila, la acomode sobre mis hombros y llame a Kendra con la mirada, no queria darle a entender que su actitud de confianzuda me hervia la sangre, simplemente queria que se diera cuenta por si misma algun dia, tal vez cuando muera a causa mia.
— Hey, espera – Dijo él – que hay de mi beso – y dicho esto, escuche un nuevo llamado por parte de Kendra, esta vez un poco fastidioso al ver que Josh decidia ignorarla y provocarle celos, pues sabia perfectamente que esta pelirroja buscaba otras intenciones ademas de agradarle.
Lo mire extrañada, buscando alguna palabra para responderle en mi diccionario mental, aunque si seguia buscando solo encontraria, "Claro", "Si", "Obvio" y ese tipo de cosas con la intencion de que me bese.
Sin pensarlo se acerco a mi desde su lugar y ataco mis labios mientras sus manos se escabullian por mi cintura, mordio un par de veces y se separo de mi jalando un poco mi labio inferior.
— Asi ya no estaran tan palidos