F.M.L

20

Al día siguiente me levanté en los brazos del chico de mis sueños, el sol ya había amanecido. Me voltié sin levantar a Alex y vi su cara de paz, su nariz que conducian a sus labios, su pelo que conducía a sus ojos cerrados con sus largas pestañas. No pude evitar sonreir. Su boca estaba ligeramente abierta, su nariz parecía fria, quice tocarla, pero al tocarla Alex abrió sus ojos.

- ¿que haces? - dijo Alex riendo. Dios, su risa ronca, me mataba.

- pensé que tu naríz estaba fria - dije sonriendo y no pude contener una risa

- ¿sabes que hora es? - dijo Alex estirandose, yo lo abracé, no estaba lista para irme de cama, es la primera vez que quería quedarme todo el día en cama, junto a él.

- no - dije aferrandome a él

- son las 11 - abrí mis ojos sorprendida

- ¿las 11? - chillé, Dios mio Santo de Jerusalén, nunca me he despertado tan... TARDE. Me paré desesperada en busca de mi sostén y mi ropa ya seca

- ¿que haces? - dijo Alex tirandose entre sus almohadas, parecia un cachorro blanco en busca de su mama para acurrucarse

- tengo que irme a mi departamento - dije en poniendome las zapatillas - mi hermana ya debe estar en casa - dije mirando la hora en mi celular. Fuck11:26.

- ¿te llevo? - dijo Alex de lo más dulce, acepté.

***

El lunes en almuerzo, me senté con Alex. Nunca hablamos sobre lo nuestro y a donde iba, pero realmente me gusta ir con los ojos vendados porque se que Alex no me dejaria caer en un hueco o chocarme con árbol.

Mientras comía lo que sea que era de almuerzo. Zach se acercó a Hannah, ya había pasado tiempo desde lo nuestro y me alegro de poder superar eso con mucha facilidad.
Zach trató de invitar a salir a Hannah, pero esta dijo que él quería salir con ella porque "era una apuesta" o "porque era facil" en esos momentos por una parte me llegó al pincho porque no todo se trata de tí, reina. Y la otra parte me dio pena porque literal todo el mundo si la veía como una facil.