12.2 El Reino

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   Al llegar a El Reino, un hombre a lomos de un caballo saludó amablemente a Jesús. Después de que éste nos presentara, nos abrieron las puertas y nos encontramos con Morgan, después, nos dirigimos a lo que antiguamente sería una sala de teatro, allí nos esperaba Ezequiel, y a su lado tenía una preciosa tigresa que se llamaba Shiva.
   Ezequiel no quiso colaborar con nosotros aunque Richard, el hombre del caballo, tratase de convencerle. Lo único que conseguimos fue que aceptara mi hospedaje y el de Daryl hasta que el peligro de que los salvadores fueran a buscarnos a Alexandria disminuyera.
   Al irse todos, Daryl fue a hablar con Morgan, no sé lo que diría Morgan, pero el sucio Daryl salió decidido de El Reino en dirección a no sé dónde.

- A dónde irá este hombre.- dije acercándome a Morgan.

- A buscar a una persona muy importante para el.- supongo que sería Carol, por eso no me preocupé mucho.

- Morgan.

- Dime pequeña.- me encanta que me digan pequeña sobretodo porque cuando era pequeña era muy alta y la gente siempre me echaba edad de más. Es como un pequeño trauma de la infancia.

- ¿Me puedes llevar a la enfermería? Es que me está ardiendo el brazo.- Morgan se acercó y me quitó la camiseta de Darylondo, al ver la pinta de aquello, me cogió como un saco de patatas y me llevó a la enfermería casi corriendo.

   Al llegar a la enfermería me desinfectaron el brazo y me pusieron un vendaje en condiciones, sólo lo llevaría un día para que no se infectara, luego ya tendría que llevar la herida al aire para que secara pronto y además, tenía que ir a la enfermería dos veces al día para que me la desinfectaran y me la yodaran para adelantar la cicatrización.

- Uf eso tenía mala pinta.- dijo un chico más o menos de mi edad vestido con una armadura.

- Pues imagínate cuando me la hicieron .- dije abriendo mis ojos exageradamente y ladeando la cabeza para exagerarlo más.

- He visto que entrabas con Morgan,¿ sabes dónde está?

- No sabría decirte, se ha ido hace unos cinco minutos, no puede andar muy lejos.

- Vale , muchas gracias.- dijo y se dio la vuelta para irse, pero entonces se giró y dijo.- Por cierto, soy Benjamin.

- (T/N)____, encantada.- dije sonriendo, y a continuación, decidí ir a hablar con Ezequiel. Sé que he dicho muchas veces que soy muy tímida, pero mi amor por los animales me obligaba a acercarme a Shiva.

- Hola, ¿puedo pasar?- dije asomando sólo mi cabeza entre las dos puertas de entrada al ''teatro''.

- Claro (T/N)____ dime, ¿qué te trae por aquí?

- He de decir que es por Shiva.- dije, y esta rugió.- Siempre me han encantado los animales y... pensé que igual podría hacerme amiga suya.

- Veo que eres valiente.-dijo- no todos desean acercarse a esta preciosidad. Ven, acércate ¿no querías conocerla?- entonces subí tímidamente y me acerqué a Shiva en cuclillas, ya que ella estaba tumbada.

- Hola bonita.- dije mientras le acariciaba la cabeza.

- Mira, ¡creo que le gustas!- dijo Jerry. Jerry era inseparable de Ezequiel, era el típico chico asiático simpático que agradaba a todos, como Glenn.

- Sí eso creo.- dijo Ezequiel sonriéndome.

   Después de estar un rato con la pequeña, si, pequeña, me fui a dar un paseo y me encontré con Daryl.

- Daryl, ¿podemos hablar?- dije con una sonrisa incómoda.

- Poder podemos, pero antes prefiero cortarme una pierna.- como no dejaba de andar,le cogí del brazo.- Para si no quieres que me enfade .- me cogió del brazo malo y me acorraló contra un árbol.

- Daryl.- gemí- me haces daño.

   Daryl me soltó y siguió su camino, yo, en cambio, me senté apoyando la espalda en el tronco. Aquel día en el santuario parecía que lo había conseguido, parecía que íbamos a estar juntos para siempre, pero me equivoqué. Estaba absorta en mis pensamientos cuando noté que se sentaban a mi lado.

- Hola (T/N)____ .- cuando me giré vi a Benja.

- Hola.

- Te veo mal, ¿qué te pasa?

- Nada, he tenido unas palabras poco agradables con Daryl.- al decir esto mis ojos se cristalizaron.

- Eh, no llores.- al decir eso, me apartó un mechón del pelo de la cara y me levantó el mentón para que le mirase.- siempre me tendrás contigo, ¿vale?

- Gracias, nos conocemos de apenas 10 minutos y ya siento que eres una parte de mí.

- En tan sólo 10 minutos me he enamorado de ti.- dijo, y al ver mi cara de sorpresa dijo.- Tranquila, sé que Daryl es el dueño de tu corazón. Pero podemos ser mejores amigos.- ante lo que había dicho le abracé como pude porque aún tenía el brazo débil y le llene de besos sonoros de abuela.

   Después de ir con Benja a curarme la herida, fuimos a cenar con su hermano pequeño y luego nos despedimos y cada uno se fue a su habitación. Como no podía dormir, fui a la jaula de Shiva.

   Me estremecí cuando escuché la puerta de la habitación cerrarse.

- Yo ya me iba.- dije al ver a Daryl.- Lo siento.

- He hablado con Carol.- dijo.- quiero que la conozcas.- la verdad me sorprendió que de repente no me amenazara.

- Iré mañana.

- Iremos, si vas tú sola seguro que te muerden.

- Mira Daryl.- exploté.- me importa una putísima mierda tu bipolaridad pero por lo menos podrías ser agradable después de haberte salvado el puto culo, te has vuelto un gilipollas de repente, la verdad es que no entiendo por qué. Ojalá volviera el Daryl de antes, mi arquero, pero supongo que el imbécil en el que te has convertido se va a quedar ahí para siempre.

- Retira lo que has dicho.- dijo mientras me volvía a coger del brazo malo (joder, que manía) y me acorralaba de nuevo pero esta vez contra la pared.

- Tranquilo, cuando todo esto acabe y hayamos vencido a los salvadores, me iré y no tendré que volver a...- iba a seguir pero sin aviso alguno, el sucio Daryl me empezó a besar con pasión mientras apretaba más nuestros cuerpos.

- Mañana por la mañana iremos a ver a Carol.- dijo, y me cogió del pelo mientras me volvía a besar para profundizar el beso.

   Es un bipolar, pero aún así me encanta, aunque me gustaría poder estar a buenas con el siempre, pero éste hombre es todo un misterio.

   Poco después de que Daryl se fuese, me fui a mi habitación y caí en un sueño profundo.

What A Dixon Needs (Edición lenta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora