[Segunda parte de "Mi Novio Es Un Vampiro"]
El tiempo a pasado, Sebastián a cumplido la promesa que le hizo a Kira de cuidar al pequeño Evans.
Sebastián y todos sus amigos extrañan a Kira, pero tratan de seguir con sus vidas.
Hasta que un día Sebast...
Después de que Nathan dijo eso los dos prendimos las motos y comenzamos a avanzar, claramente yo iba mas lento que él ya que aún no sé muy bien como manejar esto.
—¡Nathan espérame! —le grité y él se detuvo
—¿Te estás divirtiendo? —me preguntó con una sonrisa
La verdad sí, me estaba divirtiendo, aunque siento que en algún momento moriré.
—Sí, me estoy divirtiendo mucho —admití devolviéndole la sonrisa
—Ya vez te lo dije, pero eso no es todo, aún falta lo mejor —dijo él y seguimos avanzando
Nathan se detuvo en un lugar desierto donde no había nadie, aquí solo estábamos él y yo.
—¿Qué hacemos aquí? —le pregunté confundida
—Amm Scar ¿Puedo vendarte los ojos? —me preguntó él rascando su nuca nervioso
—Está bien —accedí con una sonrisa
Él me vendo los ojos y comenzamos a caminar.
—¡Cuidado una piedra! —me dijo Nathan para que no me tropezara con la piedra, pero claro como soy Scarlett Morgan Vladimir pues me tropecé y caí
—¿Estás bien? —me preguntó Nathan ayudándome a levantar
—Sí gracias, pero aún no entiendo ¿A dónde vamos? —le pregunte y escuche que se rió un poco
—Es una sorpresa —me respondió y seguimos caminando
Seguimos caminando por unos minutos hasta que Nathan me dijo;
—Espérame aquí —escuché sus pasos alejarse
Escuche el sonido del viento mover las hojas de los árboles y el sonido de los animales.
—¡Nathan!, ¿Dónde estás? —le grité pero no me contestaba
Seguí gritando unos minutos más hasta que sentí que me agarraron de la mano.
—Tranquila soy yo —dijo Nathan y yo me relaje, caminamos hasta que Nathan habló
—¿Lista? —me preguntó y yo asentí, él me quitó la venda de los ojos y no podía creer lo que veía
—Sé que no es mucho, pero no me gusta que estés triste —dijo él mirándome
—¡Gracias!... ¡¡ME ENCANTA!! —grité emocionada y lo abracé
Nathan me había preparado una cena super bonita.
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Nathan me había preparado una cena super bonita.
—¿Tu solo preparaste todo esto? —le pregunté sorprendida
—Pues la verdad... Recibí un poco de ayuda —admitió con una sonrisa
