Dieciocho

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     -Hemos llegado.

     Me asomé por un hueco de cremallera abierta, ya que seguía dentro de la mochila y miré a mi alrededor. Era aterrador.
     Había sangre por el suelo, estaba todo muy oscuro salvo por grandes farolas que iluminaban un poco la estancia. Supongo que debe ser lo normal al vivir bajo tierra pero todo me producía una sensación de repulsión y miedo que era incapaz de evitar.
     Habían muchas personas revolotenando por ahí con sus enormes alas, de muchos colores distintos.
     Las casas no estaban pintadas, solo portaban el caracteristo color gris del cemento y eran enormes, acabadas en techos puntiagudos (de los que, por cierto, en algunas de ellas, habían anti-humanos clavados).

     Me quiero ir de aquí.

     -Esto ha empeorado mucho- dijo Laura sorprendida.

     - Quiero que sepas que eso que acabas de decir es lo mejor que he oído en mucho tiempo. Pensaba que siempre había sido así.

     - Y lo era- afirmó mientras caminaba- pero no con tal cantidad de muertos.

     Mientras avanzabamos no dejaban de sorprendernos las barbaries que veíamos a nuestro alrededor. Desde sangre y sesos esparcidos por las paredes hasta palizas en la misma calle hasta la muerte. Era horroroso.
     Elena decidió taparse bien con la capucha de la sudadera y yo decidí dejar de mirar y acurrucarme en la mochila para pasar desapercibido, no quería seguir allí, me iban a matar. Tengo todas las papeletas para ello.

     Decidimos alquilar una habitación en un motel y quedarnos allí a salvo de tanto caos aunque el motel no era precisamente lo mas seguro y limpio que había, pero fue el primero que vimos y preferiamos eso a andar por ahí jugandonos el cuello.

     - Sal y ponte en la cama que tengo que devolverte a tu tamaño.

     - ¿Y no puedo quedarme aquí, seguro y calentito?

     - No- negó Laura, volcando el contenido de la mochila conmigo dentro sobre la cama para que saliera.

     - ¡Eh, que estoy desnudo!-grité mientras me tapaba. Odio a esa chica.

     - Perdón- se disculpó entre risas mientras se tapaba la cara- tendré que volver a hacerte grande sin mirar.

     - Eso espero.

     Laura murmuró unas palabras y noté como cada uno de mis huesos crecía produciéndome la misma sensación que da cuando te clavan una aguja para una vacuna. Era muy desagradable.

     - Listo-dijo, orgullosa de su trabajo, aún con los ojos tapados.

     Me miré para comprobar que no me faltaba ningún miembro. No, no me faltaba nada.
     Me vestí rápidamente mientras Laura estaba en la otra esquina de cara a la pared. Prefería cambiarme ahí a entrar en el baño. Antes abrí la puerta y vi una cucaracha del tamaño de mi cabeza y es mejor no correr el riesgo de ser brutalmente atacado por un bicho mutante.

     -Ya.

     -Vale, pero te recomiendo que en cuanto puedas te depiles el culo. Da mucho asco tanto pelo negro.

     Alejandro, respira y no digas nada. Por tu bien.

     -Y entonces- comencé mientras me peinaba un poco el pelo- ¿qué vamos a hacer?

     - No lo sé.

     -¿Qué?

     - Que no lo sé.

     - Laura, esto no tiene gracia.

     - ¿Y qué quieres que te diga? Estamos aquí para encontrar a mi hermana y tu supuesta novia, pero no se como.

     - ¿Cómo era?-pregunté, mientras me sentaba en la cama para cambiar de tema. Quería tranquilizarme un rato.

     - Era muy rara, pero divertida. Y responsable.

     - Muy responsable no era si se jugó la vida por mi y por ti.

     - Pero es porque eres un imbécil que la enamoró cuando en realidad tendría que haberte matado.

     - Eso es lo que no entiendo, ¿por qué yo? Si soy un don nadie.

     - Ojalá lo supiera, pero eso sólo lo sabe el encargado de la muerte.

     - Y tu...¿has matado a muchas personas?

     - Preferiría no hablar de ello-respondió en un susurro, agachando la cabeza-.

***

     ¡Hola! Vengo aquí a hacer algo de spam. Recomiendo la reciente historia corta de Iker558 (hay que apoyar un poco, yo también lo habría agradecido cuando empecé). La, también reciente pero con más capítulos historia de natural_adventures llamada Una aventura inesperada. Y para finalizar, la también reciente historia de -RamdomStories-, historia que llevo a medias con una amiga.
     ¡Nos leemos en el siguiente capítulo!(cuando me de por subirlo xD)

Mientras no digas nadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora