Mi profesor de Inglés. | Colton haynes | ©

Capítulo 14 / corregido.

Se escuchaba el sonido de la ambulancia fuertemente, Claire a mí lado se encontraba sumida en sus pensamientos mirando hacia la nada, estábamos apartadas de todos, sentadas en un tronco de una fogata que habían hecho. Resultó ser que la chica había consumido droga y tuvo una sobredosis luego se había caído por un cerro el cual era pequeño pero lleno de rocas, por lo que se golpeó la cabeza y llegó hasta donde la había encontrado.

Le conté lo sucedido a Claire y también le pregunte donde había estado, solo me respondió ''con Max''.

¿No estaban peleados o algo así?

Andrew sí me había seguido, él había llamado a la ambulancia cuando yo pegué el horrible grito y me quedé con los ojos desmesuradamente abiertos, observando el cuerpo sin vida que había tenido en frente mío. Son aproximadamente las dos de la madrugada, mañana a primera hora partiríamos de nuevo a casa, se supone que nos quedaba un día más pero por lo ocurrido regresaremos antes.

Caminamos a la cabaña junto con Claire, estábamos cansadas, agotadas y estresadas, hemos estado toda la noche en el bosque, yo relatándole a los policías lo que pude ver, y Claire simplemente observándome desde unos metros más atrás ya que los policías no le permitieron acercarse.

Al llegar vimos a Luce en su cama dormida, Trevor la tenía abrazada por la cintura, mientras él dormía plácidamente. Es raro, nunca pensé verlos así, ellos prácticamente se odiaban. Y sí que se odiaban. Soltamos una pequeña risita con Claire al verlos y nos acostamos en nuestras respectivas camas, ya le había relatado a Claire lo ocurrido con Luce y mañana hablaríamos con Derek.

Abrí los ojos y me incorporé en la cama, mis ojos aún ardían debido a cansancio, mire a los lados y aún estaba Trevor con Luce abrazados y durmiendo plácidamente.

Me vestí y salí afuera, había un chico limpiando el suelo, me miró y me sonrió. Le sonreí y me acerqué a él, normalmente no hacía este tipo de cosas ya que soy muy tímida pero, estaba aburrida y quería conversar.

—Hola. —saludé con una sonrisa.

—Hola, soy Luke —me estrecho la mano.

—Annie. —sonreí.

— ¿Eres de la escuela que vino ayer verdad?—dejó de barrer y puso su atención en mí. — ayer te vi, bailando en la pista.

Quizá cuantos más me vieron, que vergüenza.

—Oh, sí, ¿tú trabajas aquí? —pregunté.

—sí, si quieres podríamos ir a tomarnos algo algún día, por cierto bailas extremadamente bien. —dijo sonriendo y se mordió el labio inferior.

Se veía amigable este chico, bastante guapo, pero parecía de esos típicos mujeriegos. Tampoco me iba a fiar mucho de él.

—Oh, no vivo por aquí, ya sabes solo vengo por el instituto. —tiré un mechón de pelo detrás de mí oreja algo incomoda.

—Dame tu número de teléfono entonces. —se acercó un poco más a mí.

Asentí, iba a sacar mi móvil para darle mí número, cuando alguien me lo arrebato de las manos.

—Está prohibido que las alumnas hablen con extraños. —Andrew sonrió burlonamente.

—Y está prohibido que los profesores se follen a las alumnas. —dije yo, sonriendo.

Su mandíbula se apretó y me miro con el ceño fruncido, Luke se veía muy incómodo.

—Te dejó mi número para que me llames. —me volvió a mirar y me anotó algo en un papel pequeño, luego me lo entregó. —ahí está, llámame cuando quieras nena.