Capítulo 4

6 0 0
                                    

La casa era enorme, ya se que aquí vive mucha gente, pero no me llegaba a imaginar que la casa iba a ser tan grande. Mi padre verdaderamente tenía demasiado dinero, la gente lo quería, quería demasiadas cosas de él, pero esas niñas no podían lograr nada tenía unos guarda espaldas que no dejaban que nadie se acercase a esa persona a la que nadie puede conocer como quieren. Parece muy reservado pero quería saber cosas de él, por lo que todo el trayecto hasta esa hermosa casa se paso demasiado rápido hablando de demasiadas cosas: ¿Tienes pareja? ¿Cómo es que vives tu solo? ¿no te aburres no pudiendo salir de tu propia casa cuando tu quieres? ¿eses chicos con los que vives llevan siendo mucho tiempo famosos?. Parecía que lo estaba agobiando pero es que las palabras salían solas de mi boca, sobre todo cuando le hice la pregunta que tanto miedo me daba, ¿por que te fuiste y nos dejaste a mamá y a mi solas? Con esa pregunta parecía que lo había dejado sin aire. Era mi padre, por fin, estaba aquí, a mi lado y podría hacerle todas las preguntas que estuve pensando todo este largo tiempo sin tener que preocuparme de nada ni de nadie, solo estábamos él y yo.

Al entrar en la casa, una señora con uniforme, nos abrió la puerta al instante. Se notaba que nos habían estado esperando, dejaron mis maletas en el suelo de la entrada y mi padre me dirigió hacia una sala en la que estaban cinco chicos y una señora.

-Hola chicos, hemos llegado a casa.- Dijo mi padre contento de tenerme aquí.

-Papá puedo irme a mi habitación esto me está dando demasiada vergüenza.- Le dije al oído.

-Estate tranquila que no pasa nada, te han estado esperando parece que no se han movido ni un milímetro desde que salí de aquí. Bueno ya que lleváis tanto tiempo esperando os la voy a presentar. Esta es mi hija, se llama Eva y tiene 17 años, Eva éstos son Cristian (que es el que tenía mayor interés en conocerte).- Me dice al oído para que el chico no se sienta mal y además era verdaderamente guapo.- Este es John, José, Manuel y Miguel.

-¿Y ella es tu novia o tu mujer?- le dije tímidamente.

-No hija, ella es tu abuela Maia.- Todos se echan a reís por lo que acabo de decir, la verdad es que yo no conocía a esa señora, o llevaba demasiado tiempo sin verla que mi subconsciente me jugó una mala pasada.

Me indicaron donde estaba mi nueva habitación y un señor me llevó las maletas poco después de que yo llegase a ella, me dijo mi padre que podría decorar la habitación como yo quisiera, pero no se si es porque mi habitación de Madrid era demasiado pequeña o no sabía es porque pero a mi la nueva habitación que ya era de mi propiedad me parecía demasiado bonita y no sabía si en verdad quería cambiarla. De alguna forma tenía que poner mis cosas en algún sitio, llevaba un buen rato apampando para la nada mientras que el señor que me había traídos las maletas hacía un rato me preguntaba si me encontraba bien unas cuantas veces.

Poco después me recuperé, no había visto nada tan bonito en la vida, me puse a recoger mis cosas y a guardar las maletas debajo de la cama para que no ocuparan una gran parte de mi hermosa. Me asuste cuando alguien llama a la puerta y yo aun estaba colocando mis cosas del pelo y de la cara sobre una mesita que estaba justo enfrente a mi cama.

-¿Quién es?- Digo rápidamente mientras que me acerco a la puerta.

-¿Puedo pasar, que quiero presentarme bien?-Era uno de los chicos que estaban abajo cuando llegué.

-Si claro, pasa.

-Hola, soy Jonh. Creía que no te encontraste muy cómoda ahí abajo y quería presentarme bien para que por lo menos mañana te encuentres mejor en esta casa.

-Te lo agradezco de verdad, no estoy acostumbrada a vivir rodeada de gente, además llevo muchísimo tiempo estando sola y ahora esto es un gran cambio.

-Lo se, tu padre nos contó algo, cada vez que hablaba con tu padre se ponía demasiado triste, llegaba al punto en el que se iba a su habitación porque necesitaba desahogarse un poco para que no le afectasen tanto las cosas. Pero se notaba que el te echaba demasiado de menos y te necesita Eva, nosotros lo conocemos demasiado bien y se que él necesita que tu estés aquí con él.

-Yo solo se que si que lo eche demasiado de menos, es mi padre y una hija sin su padre no es nada y todo el mundo lo sabe. También yo necesitaba a mi padre en algunos momentos pero con el tiempo me fui acostumbrando a que no todo es como tu quieres, que a veces lo que necesitas no está ahí, y que no todo el mundo te va a apreciar por como tu eres, que la gente quiere tener al lado a gente con la que pueda salir de fiesta y a gente que le haga estar con los chicos y chicas populares.

-El mundo es algo raro, nosotros nunca tenemos problema porque la gente con la que estamos es siempre la misma y además nos pasamos el día con tu padre y con nuestros guarda espaldas, encerrados en esta casa muchas veces porque en la calle hay un montón de fans que quieren demasiadas cosas de nosotros, pasamos de ser unas personas que no les importábamos a nadie a estar así rodeados de gente.

-Ahora se que por lo menos puedo tener a un amigo aquí en esta casa, no se como son los demás chicos pero espero ir conociéndolos poco a poco.

Mi vida con élWhere stories live. Discover now