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Garethbale11

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Garethbale11 Día con el campeón, te amo mi pequeño.

Ver los 1783 comentarios.

Lukam10 Que alegría que todo se haya arreglado, Christian necesita a sus padres.

Toni.kr8s Miren al pequeño galés.

Rubimar13 Mi niño hermoso❤.

Nachofdez90 Lo bueno es que se parece a los Fernández.

Lucasvazquez91 Como ha crecido, que impresionante.

Laverosantos Mi niño precioso, el favorito de la tía Vero.

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Las cosas entre Rubimar y Gareth cambiaron drásticamente, el galés aceptó cambiar la decisión del tribunal y ahora comparten la custodia de Christian.

Luego de aquel incidente entre ellos, Fernández viajo para arreglar las cosas con Christian, se supone que hablarían de ellos y su futuro, ambos decidieron vivir en Vitoria, pero ella viajaría los días que el pequeño tenga que ver a su padre. Para sellar su acuerdo, hicieron el amor bajo la luz de la luna que entraba por la ventana de su habitación.

En el fondo se sentía mal por ocultarle su beso con Gareth, pero sabía que era mejor evitar una discusión.

Hoy tocaba visita, así que Gareth se llevó a Christian todo el día. Cuando la tarde cayó, el galés cumplió y llevó al niño a la casa de Nacho, tal como se lo pidió la venezolana.

-Mami. -gritó el pequeño en cuanto vio a Rubimar.

-Hola mi niño, ¿todo bien? -preguntó colocándose a la altura de Christian.

-Si mami, comí un helado grandisimo. -movió sus brazos emocionado.

-Qué bueno mi niño, ve a jugar con tus primitos. -asintió entusiasmado y corrió junto a los hijos de su hermano mayor.

-Nada se compara a estar con él, gracias Rubimar. -el galés tomó las manos de la castaña.

-No tienes nada que agradecer, lo bueno es que ahora están juntos. -sonrió.

Las miradas de ambos conectaron por varios segundos, ellas gritaban lo que sus bocas eran incapaces de decir. Se amaban, se amaban completamente.

-PAPI. -gritó Chris y de inmediato voltearon a ver al pequeño.

Santos estaba allí, observando la escena entre la mujer de su vida y el galés. Christian corrió a los brazos de su padre y este lo cargo llenándolo de besos.

-Christian. -pronunció la venezolana.

-Hola amor. -el jugador del Alavés le dio un beso con el niño aun en sus brazos. -Hola Gareth.

-Que bueno saludarte Christian. -mencionó el galés con una media sonrisa.

-Pensé que tendrías partido cariño. -la castaña observó a su prometido.

-No me convocaron así que decidí venir a verlos. -besó la mejilla de Chris.

-Bueno, yo me retiro, nos vemos la otra semana. Adiós mi pequeño, papá te ama. -acarició la mejilla del pequeño y se fue de la casa de Ignacio.

-Ahora si, podemos ir a dar una vuelta los tres, nos hace falta. -Fernández tomó la mano de su hijo.

-No amor, debemos hablar. -la observó seriamente. -pequeño, ve con tus primos y tu tío Nacho.

Dejó al pequeño en el suelo y se regresó a jugar. El delantero venezolano tomó las manos de su prometida y la llevó a un banquito que estaba cerca.

-Amor, ¿qué sucede? -preguntó con preocupación.

-Esto es lo más duro que he tenido que hacer durante mucho tiempo, te amo demasiado mi amor, por eso no puedo retenerte a mi lado. -sus ojos empezaron a enrojecerse.

-Christian, no tengo idea de que estás hablando. -observaba a su prometido llena de nervios.

-Que te dejo en libertad, acabo de presenciar como se veían Gareth y tú, el amor entre ustedes nunca murió y ahora que sabe la verdad pueden formar una familia. -sus lágrimas bajaban como cascadas.

-No me digas eso Chris, mi vida está a tu lado, tenemos una familia. -la venezolana estaba igual que él.

-Ambos sabemos que no es así. -tomó las manos de la castaña entre las suyas. -es mejor cancelar la boda, sé feliz con Gareth y con Chris, pero eso si, no pienso dejar de verlo porque lo amo más que a mi vida.

El delantero se acercó a Rubimar para besarla por última vez, un beso lleno de tristeza. Sus labios mojados por las lágrimas se saboreaban lentamente, era un beso de despedida. Christian deseaba hacerla suya por última vez, pero sabía que de hacerlo no sería capaz de dejarla ir.

-Te amo pequeña, sé feliz con el galés. -sonrió y volvió a besarla.

El venezolano se despidió de su hijo con un abrazo y muchos besos, esa despedida le dolía hasta los huesos.

Dejaba al amor de su vida para que fuese feliz, sin duda una de las pruebas de amor más grandes.

Lástima que el destino le jugaría en contra y muy pronto tendría que volver a ella.