Capítulo 7

265 21 9
                                    

— ¡Tú, maldito idiota! —gritó Wes mientras que su rabia sobrepasaba a Blaine.

— Estaba tratando de dormir, —intentó Blaine, pero Wes iba con todo y no aceptaría nada de su mierda.

— Me importa una mierda si lo estabas. Has estado llorando otra vez, y no me sorprende. ¿A qué demonios creías que estabas jugando? Y ese pobre niño. Humillación no es la palabra.

— De todos modos, ya no importa, —dijo Blaine malhumorado mientras se dirigía a la cocina.— Me dijo que no quiere verme otra vez.

— Bueno, uno de ustedes tenía que acabar con esto. Estoy feliz de que uno de los dos fuera suficientemente adulto para darse cuenta.

— Wes...

— No me vengas con "Wes". Lo que yo vi en la pista de baile me hizo sentir tan incómodo. Te veías como si estuvieras tratando de inhalarlo.

— Creo que así fue.

— Fue más intenso que todo lo que he visto en mi vida, y mira que he visto a Sebastian en acción y eso ya es mucho. ¿Realmente te sorprendió que el pobre niño tratara de besarte? Parecías Lestalt el vampiro descubriendo una nueva presa.

— No... no me sorprendió, —dijo Blaine, llenando dos tazas con café y entregándole una a su amigo, antes de sentarse a la mesa.

— ¿Entonces por qué te pusiste así?

— ¡Porque tuve que contenerme para no besarlo! Wes, lo siento muchísimo si piensas que es asqueroso o lo que sea pero... ¡se sintió tan bien tenerlo entre mis brazos!

Wes suspiró, tomó un sorbo de su café y luego miró nuevamente a Blaine.— No creo que sea asqueroso. Creo que vi a dos personas que están enamorándose súbita y profundamente, y que no pueden hacer nada para evitarlo.

— No. No... eso no...

—Niégalo todo lo que quieras, Blaine, pero es la verdad. Puedes jugar al gato y al ratón el tiempo que quieras, pero ustedes dos están irresistiblemente atraídos el uno al otro y finalmente no serás capaz de negarlo por más tiempo.

— ¿Entonces qué? ¿Me estás diciendo que debo ir con todo?

— No. No puedo decirte eso, Blaine. Quieres que lo diga para que te sientas mejor contigo mismo y menos culpable con toda esta situación... pero no puedo. Soy de la misma edad que tú, y enseño a niños de la edad de Kurt. No puedo decir que estoy de acuerdo en que lo acoses.

— No uses esa palabra.

— ¡¿Ves?! Tu mismo te sientes incómodo con eso. Deja a Kurt en paz por un tiempo. Por algunos meses si es necesario. Intenta tal vez contactarlo en el verano.

— ¿En el verano? ¡Pero eso está a siglos de distancia!

— No exageres, que no es tanto. Y eso le dará a Kurt tiempo para hacerse más fuerte, más maduro. Tu también para el caso.

— Pero... ¿Qué va a pasar con la escuela? ¿Y el acoso?

— Lidiará con eso de la misma forma en que siempre lo ha hecho. Dijiste que tiene un papá que lo apoya, y también tiene otros amigos, no lo olvides.

— No me gusta pensar en mi vida si no está él en ella, —dijo Blaine tristemente, lo que alentó a Wes a ponerse de pie y envolverlo en un abrazo.

— Sólo estuvo en tu vida por dos meses. Antes de eso tuviste treinta años de ignorancia.

— La ignorancia es la felicidad.

— Absolutamente. Así que vuélvete ignorante otra vez. Puedes hacerlo, estoy seguro.

~*~

Wake me up InsideDonde viven las historias. Descúbrelo ahora